Empleados de Inespal dicen que el comprador que sugiere el Gobierno es un 'pirata'

Los trabajadores de la empresa Inespal de Linares (Jaén) reclaman la privatización y dejar de estar en manos de la Sociedad Estatal de Participación Industrial (SEPI) para conseguir que una empresa de tecnología punta deje de estar en números rojos y pase a ser rentable. Sin embargo, no quieren que se venda a 'un pirata empresarial', calificativo con el que el presidente del comité de empresa, Francisco Montoro, se refirió al propietario de Aluminio Ibérico, Clemente González, con el que la SEPI negocia la privatización.

'No somos rentables en manos de un funcionario, por eso queremos estar privatizados ya', resaltó el presidente del comité de empresa, que ayer se coló en la conferencia de prensa convocada por el ministro de Hacienda en Jaén, Cristóbal Montoro, para poder preguntarle en persona por los planes de futuro de esta factoría andaluza dedicada a trabajar con aluminio.

La inversión estatal en Inespal supera los 4.000 millones de pesetas y tanto el comité de empresa como los sindicatos han advertido de que no están dispuestos a que la empresa de Linares se 'regale' a un empresario cercano al Partido Popular. UGT exigirá al Gobierno 'rigor y seriedad' en cualquier operación de venta, indicó el responsable de Metal del sindicato Manuel Morales. El sindicato reclama que el empresario que adquiera Inespal tenga detrás un proyecto industrial y un plan de futuro.

En la fábrica de Linares trabajan 79 personas y si la venta se hace a un empresario que termine recortando empleo, añadió Morales, el golpe para esta comarca sería demasiado fuerte. La fábrica de Linares formaba parte del grupo Inespal, que tenía varias plantas en España. Sin embargo, ésta fue la única que no entró en el proceso de privatización que hace tres años puso al grupo en manos de la multinacional estadounidense Alcoa. Los trabajadores aseguran que la fábrica está funcionando en la actualidad al 30% de su capacidad.