La dirección de Delphi advierte de que la empresa 'está sentenciada' sin más flexibilidad laboral

La dirección española de la multinacional Delphi advirtió ayer de que la planta de Sant Cugat 'está sentenciada' si mañana los trabajadores no aprueban introducir más flexibilidad laboral en ella aceptando los turnos en fines de semana. El director de recursos humanos de la empresa, Carles Cortés, afirmó que el resultado del referéndum de mañana es vital para evitar 788 despidos de la actual plantilla de 1.125 personas ya autorizados por la Generalitat. La empresa, del sector auxiliar del automóvil, quiere fabricar una nueva bomba de agua para coches y pretende nuevos turnos de trabajo.

Los sindicatos CC OO y UGT están a favor de introducir más flexibilidad laboral. Por el contrario, el Colectivo Obrero Popular (COP), primer sindicato en la empresa, está en contra.

La multinacional norteamericana ha congelado una inversión de más de 20.000 millones de pesetas prevista para este año hasta que se alcance un acuerdo. La empresa ha obtenido beneficios que superan o rondan los 2.000 millones de pesetas entre 1997 y 1999.

La empresa solicitó reducir empleos después de que el 66% de la plantilla rechazase en un referéndum un preconvenio laboral para los próximos tres años, que habían consensuado CC OO y UGT con la dirección. El COP se mantuvo al margen y realizó una campaña en contra de este acuerdo. El sindicato está muy arraigado en el Vallès Occidental, donde nació, pero tiene también presencia en el Baix Llobregat y el Barcelonès. El embrión del COP se forjó en la lucha contra el franquismo y con la llegada de la democracia se constituyó como grupo independiente dentro de Delphi. En 1984 adoptó el nombre de Colectivo Obrero Popular.

A un día de la nueva consulta el COP sigue estando en contra de la propuesta de la empresa, mientras que CC OO, UGT y la empresa defienden firmar un acuerdo.

- ¿Cuál es el origen del conflicto laboral? La empresa apuesta por un nuevo producto, la bomba de inyección directa para motor Diesel, la common rail, y eso implica ir eliminando la anterior producción, la bomba de inyección indirecta. 'Este cambio se haría de forma gradual, pero se calcula que en el momento de pleno rendimiento, el año 2003, sería necesario abrir la factoría 289 días, mientras que ahora funciona 224 al año', dice Carles Cortés, director de recursos humanos de la empresa.

- ¿Cómo afecta el nuevo producto a los trabajadores? Para adaptarse al nuevo producto hay que hacer algunos ajustes de turnos, lo que implica trabajar algunos sábados. 'Pero en el cómputo general se disminuyen de 1.660 a 1.600 las horas anuales de trabajo', dice Cortés. 'Los turnos que hay en la factoría deberán homogeneizarse en 200 personas y organizarse en cuatro grupos de trabajo, de manera que mientras tres trabajan uno descansa. Aunque hay varias posibilidades, se habla sobre todo de trabajar tres semanas de lunes a sábado y descansar la siguiente semana', dice Jordi Cases, de CC OO. 'Lo que no cambia son las vacaciones ni demás festivos, por lo que se mantienen las tres semanas seguidas de vacaciones, más los días de Navidad y Semana Santa, junto con los festivos normales', añade Cases.

Luis Prieto, del COP, discrepa: 'Muchas personas tendrán que cambiar de turno, lo que significa que te alteran casi toda tu vida de pareja y social ya que te has organizado durante años en función del horario laboral. Además, quieren que se trabaje los sábados obligatoriamente por una cantidad ridícula. Antes, cuando había puntas de trabajo, se acudía voluntariamente y cobrabas unas 20.000 pesetas por un sábado.

- ¿Se prevén compensaciones por el cambio de turno? La empresa ofrece un aumento salarial del 18% o 19% entre el año 2000 y el 2003, además de una reducción del total de horas trabajadas. Además, el objetivo de la dirección era durante este tiempo prejubilar entre 60 y 70 personas y crear unos 300 puestos de trabajo nuevos', dice el director de recursos humanos. Jordi Cases, de CC OO, señala que se prevé 'un crecimiento del salario base de hasta el 10% en los próximos tres años, además del crecimiento del IPC'. 'Desde CC OO y UGT pensamos que no es el mejor acuerdo del mundo, pero que es un buen convenio laboral', añade.

El representante del COP vuelve a discrepar. 'Las compensaciones suponen un incremento de hasta el 19% del salario por trabajar de lunes a sábado. Nosotros proponemos una solución más económica a la empresa, que es un incremento de hasta el 13% para seguir trabajando de lunes a viernes y que los sábados sea voluntario trabajar. Cada sábado trabajado se debería compensar con otro día de fiesta y una prima de unas 12.000 pesetas.