La Iglesia une a los vascos en contra de ETA

La Iglesia reclamó ayer a ETA que deje las armas en el curso de un acto por la paz en Vitoria convocado por los obispos vascos y navarros, al que acudieron 50.000 personas, y durante el cual se leyó un mensaje del Papa en el que insta a promover la unidad y reconciliación y aboga por 'levantar la voz a favor del valor de la vida, de la seguridad, de la integridad física y de la libertad'. Es la primera vez que las dos diócesis organizan conjuntamente una iniciativa de este tipo en más de 30 años de terrorismo etarra.

Euskal Herritarrok (EH), la marca electoral de HB, fue la única organización política que se desmarcó abiertamente de la iniciativa de la Iglesia, que consiguió reunir a dirigentes de todos los partidos democráticos. Los colectivos de víctimas del terrorismo criticaron que la Iglesia se ha olvidado durante tres décadas de los que más sufren los atentados. Los obispos pidieron ayer perdón por ese olvido, reclamaron diálogo a los partidos y se comprometieron a estar cerca de quienes hoy viven 'acosados por el miedo'.

El ex alcalde de Vitoria y militante del PNV José Ángel Cuerda declara en una entrevista que 'el PNV debe renunciar a la independencia mientras exista ETA', y añade que dentro de su partido hay 'un deseo ferviente de que se produzca un cambio de rumbo'.