Fusiones en juego

El sector juguetero español vive momentos convulsos. La compra de la firma Unice por el grupo francés Smoby, al que pertenece Juguetes Picó, de Ibi (Alicante); el acuerdo entre Educa y Borrás, empresas que, tras su fusión, han logrado grandes perspectivas de negocio y se han convertido en uno de los principales grupos del juguete español, y la absorción de Inovac Rima (Vitoria) por Popular de Juguetes (Valencia), son algunas muestras del ciclo de concentración empresarial en el que está inmerso un sector que busca nuevos mercados exteriores. India está en el punto de mira.

Las firmas jugueteras españolas no sólo intercambian acciones. También están llegando a acuerdos estratégicos para repartirse el mercado. Botón de muestra de esta política de alianzas con la que las empresas del sector afrontan el nuevo siglo es el caso de la empresa Juguetes Chicos, de Ibi, que ha pactado con la italiana Graciolly. Esta última se encarga de vender los productos de ambas jugueteras en Europa, mientras la primera hace lo propio en España, Portugal y América.

El presidente de la Asociación Española de Fabricantes de Juguetes, Salvador Miró, explica que con esta política de concentración las firmas buscan romper la estacionalidad de las ventas (el 74% de las ventas de juguetes en España se realizan durante la campaña de Reyes). Pero, sobre todo, buscan asegurarse la distribución. 'La firma que no pertenezca a un grupo o carezca por sí sola de un gran potencial corre el riego de que la gran distribución no le compre', explica Miró. Éste es un problema que se palpa en las ferias internacionales del juguete, donde no más 30 distribuidores mundiales deciden el 90% del mercado.

La Asociación Española de Fabricantes ha dado los primeros pasos para conquistar el mercado de India. Salvador Miró explica que firmas españolas fabricarán en ese país asiático a través de empresas indias para vender en ese país. 'En India hay más ciudadanos de clase alta que habitantes en España, y toda esa gente desconoce nuestro producto'. Salvador Miró considera que la competencia con los productos chinos será muy dura, pero el juguete español puede encontrar un hueco por su calidad.

Empresas españolas fabrican ahora en México, Brasil, Argentina y Chile, países en los que firmas nacionales también han llegado a acuerdos con firmas americanas para que distribuyan los productos españoles. Latinoamérica 'tiene un gran futuro para nosotros', según Miró.

La pujanza de China como potencia exportadora ha tenido, respecto a la importación, un papel extraordinariamente relevante, ya que se incrementó un 21,2% el año pasado. La entrada de juguetes del exterior al mercado nacional aumentó un 11,82% en el mismo periodo. Del total de los juguetes importados por España, los productos chinos representan el 64,64%. El notable incremento de la importación, del que tira el peso de los videojuegos, ha sido determinante para comprender el aumento del consumo. El pasado año, la facturación propia, pese a crecer de forma significativa, no lo hizo de la misma manera que el aumento experimentado por las importaciones en un año de alto consumo en España.

La mayoría de empresas radicadas en la provincia de Alicante se han especializado en productos de calidad y de diseño atractivo que cada vez tienen mayores componentes educativos y pedagógicos. La Asociación de Fabricantes no cree que la suspensión de pagos presentada por la firma Jesmar de Biar (Alicante), una de las principales fabricantes de muñecas de España, sea la punta de lanza de una eventual crisis en el sector, sino 'un caso puntual'.

La estimación de las ventas del año 2000 en el sector juguetero -todavía no hay resultados finales- eleva la facturación a más de 136.000 millones de pesetas, frente a los 129.000 millones de 1999, según la Asociación Española de Fabricantes de Juguetes. Las exportaciones aumentaron durante 1999 entre un 5% y un 7%, mientras las ventas al mercado interior se incrementaron cerca de tres puntos. Según datos de la Dirección General de Aduanas, a 31 de octubre de 2000 las exportaciones ascendían a 55.820 millones de pesetas, un 12,37% más que el año anterior.

El crecimiento más notable de las exportaciones se ha producido en Polonia, Turquía y Hungría. El mercado ruso continúa en declive. Mientras crecieron considerablemente las ventas en los mercados del Reino Unido, Portugal, Países Bajos y Grecia, descendieron en Francia e Italia. Alemania continúa a la cabeza de los países de destino de las exportaciones europeas.