Serra Ferrer gana el pulso y obliga al Barcelona a deshacer el fichaje de Cris

'El fichaje se ha descartado tras escuchar la opinión unánime de Serra Ferrer y Carles Rexach. Ni ficharemos a Cris ni a ningún otro jugador', dijo anoche Gaspart tras la reunión de la junta. El vestuario ganó finalmente el pulso a la directiva. La plantilla se había opuesto desde el primer día al fichaje de Cris hasta el punto de cuestionarlo como refuerzo. '¿Quién es Cris?', llegó a preguntar con ironía Frank de Boer, que apuntó que Reiziger también podía actuar de central. Serra Ferrer pidió a Gaspart, antes del parón de Navidad, refuerzos para su frágil defensa, pero no a cualquier precio.

El técnico mallorquín sabe que su mejor valedor es el vestuario y no ha querido contrariarlo con un fichaje en principio menor. Por contra, Serra Ferrer sí pidió la llegada de Kaffour, del Bayern de Múnich, o de Chivu, del Ajax, aunque las negociaciones fracasaron. Consciente del pulso que mantenía con la junta, Serra Ferrer evitó en Oviedo criticar a su defensa pese a que el Barça sufrió para vencer (ganaba 0-3 y lo hizo al final por 2-3).

Ángel Fenández, el vicepresidente del Barça, que actuó de presidente en Navidad por las vacaciones de Gaspart, mostró un decidido interés en Cris hasta el extremo de asegurar que ésa era la única alternativa válida. Serra Ferrer replicó el día de Año Nuevo afirmando que el brasileño no tenía el perfil deseado: un jugador internacional, con experiencia y habituado a la presión. La junta ignoró la postura del técnico y tres días después alcanzó un acuerdo con el Cruceiro: 400 millones por la cesión hasta junio y 1.000 millones por un traspaso hasta 2003. Pero no sirvió de mucho: Serra Ferrer sorprendió al insistir, antes de viajar a Oviedo, que Cris no era prioritario.

El conflicto ha dañado a la imagen del Barça y ha desnudado la escasa organización deportiva del club desde la marcha de Louis Van Gaal. El Barça carece de la figura de director técnico para planificar la temporada. Todo el poder recae ahora en manos de Serra Ferrer, que comparte las funciones de entrenador y director deportivo pese a que su nombramiento fue una solución de emergencia en plenas elecciones el pasado verano. Rexach, asesor deportivo del presidente y promotor del fichaje de Cris -ahora ha cambiado de opinión-, lamentó hace días que el Barça no contara con un organigrama similar al del Madrid y pidió a la junta un rediseño de la estructura deportiva para planificar el próximo curso.

'Aún no sabemos nada. El vuelo se ha retrasado y la negociación se ha aplazado a mañana', dijo ayer uno de los dos directivos del Cruzeiro que viajaron a Barcelona, ignorando la decisión de la directiva barcelonista. Cris supo por la prensa que no recalaría en el Camp Nou: 'Estoy triste. Me veía jugando en el Barça'.