Un matrimonio de Alcorcón muere al inhalar el monóxido de carbono generado por una caldera

En la vivienda se encontraban el matrimonio, dos de sus tres hijos y la abuela. Fue precisamente Ángela García Bastos, de 86 años, la que dio la voz de alarma. La mujer se encontraba en su cama y empezó a sentirse mal, con náuseas. Pidió entonces ayuda a su nieto Federico Martín García, de 21 años, que estaba en el salón de la vivienda.

Cuando Federico acudió a ver qué le pasaba a su abuela comprobó que algo raro ocurría. Entonces entró en el cuarto de baño y halló a sus padres muertos. Guillermo Martín Montero, de 67 años, que había entrado a ducharse, estaba tirado en la bañera. Su esposa, María del Carmen García Bastos, de 70 años, había caído fulminada junto al lavabo.

El hijo avisó de inmediato, a través del teléfono de emergencias 112, a la policía y al servicio de urgencias 061 del Insalud. Mientras, comprobó que su hermana también se había intoxicado con el monóxido de carbono.

Cuando llegaron los facultativos del 061, sólo pudieron certificar la muerte del matrimonio. Atendieron entonces a la octogenaria, que presentaba una intoxicación moderada por el gas letal. La peor parte la había recibido María Cruz Martín García, de 32 años, que había entrado en coma y no respondía al tratamiento de los facultativos. La UVI móvil del 061 del Insalud la trasladó con carácter urgente a la Fundación Hospital Alcorcón, que se encuentra a unos 700 metros del lugar del accidente. Durante el camino, la mujer vomitó, por lo que su estado mejoró ligeramente, según señaló una portavoz del 061 del Insalud.

La abuela fue trasladada en una ambulancia convencional, ya que su estado no revestía gravedad. El hijo, Federico Martín García, fue asistido por los médicos del 061 en el lugar del accidente y recibió el alta a los pocos minutos. Era el menos afectado.

Una portavoz de la Fundación Hospital Alcorcón explicó anoche que María Cruz Martín García se encontraba en observación. La paciente había reaccionado al tratamiento y se recuperaba lentamente de la intoxicación de monóxido de carbono. La anciana estaba pendiente de recibir el alta médica a lo largo de la noche, ya que su estado era leve.

Según varios vecinos de las víctimas, la caldera de las viviendas está alimentada por gas natural. Ésta se halla instalada en un pequeño lavadero cercano a la cocina. La ventana del único cuarto de baño que tiene la vivienda da a este pequeño habitáculo. El matrimonio fallecido había cerrado hace tiempo este tendedero con una mampara de aluminio y cristal.

'Habían colocado la mampara hace mucho, pero lo que me extraña es que se hayan intoxicado, porque tenían puestas las rejillas de ventilación y éstas estaban libres, de forma que el monóxido ése debería haber salido por ahí. Además, siempre acostumbraban a dejar un poco abierta la ventana, por si acaso', explicó una vecina del primer piso. 'Desde luego, a raíz de esto, voy a quitar la instalación de gas. Me parece que es muy peligrosa', añadió.

Guillermo Martín Montero se jubiló hace tres años. Había trabajado en la fábrica de cervezas Mahou, según sus vecinos. Su esposa siempre había sido ama de casa. Vivían en la calle de Cisneros desde que se entregaron los pisos, hace ahora 24 años. El matrimonio había tenido tres hijos (un varón y dos hijas). Una de ellas no vivía en el domicilio familiar, porque ya se había casado.

La policía preguntó ayer a todos los residentes en el inmueble si ellos habían olido a gas durante el día o en fechas anteriores. Todos dijeron que no. 'Un vecino ha estado de obras y ha barnizado todas las puertas, por lo que, si hubiera habido un escape de gas, no lo habríamos notado', explicó Camilo Rosillo, el vecino que vive en el piso contiguo al del matrimonio fallecido. Los bomberos de Alcorcón hicieron varias pruebas de la instalación y comprobaron su funcionamiento.

La empresa, sin noticias

Un portavoz del servicio de averías de la compañía Gas Natural señaló a las nueve de la noche de ayer que ningún organismo público (ni la policía ni el juzgado de guardia) le había notificado las muertes de Alcorcón y que la primera noticia se la habían dado los periodistas. 'Mañana acudirán al domicilio del siniestro técnicos nuestros y comprobarán la instalación para determinar las causas del siniestro', señaló el empleado de Gas Natural.

Los cuerpos de los fallecidos fueron trasladados al depósito de cadáveres de Alcorcón, donde anoche les estaban practicando la autopsia. Está previsto que hoy sean enterrados en el cementerio alcorconero. El Juzgado número 2 de la localidad se encarga de la instrucción del caso.

Éstos son los dos primeros fallecimientos por monóxido de carbono en este año. En 2000, nueve personas perdieron la vida por inhalar el mortal gas. El primer caso ocurrió el 5 de mayo en Mejorada del Campo, donde falleció un matrimonio en su chalé. Pero el accidente más grave se registró el 18 de octubre en el madrileño barrio de San Blas, donde murieron los cinco componentes de una familia (un matrimonio y sus tres hijos pequeños). El último incidente del año pasado sucedió el 25 de diciembre en el municipio de Galapagar; allí, dos jóvenes inmigrantes ecuatorianas fallecieron en el interior de un chalé.