Anand es el campeón oficial

Viswanathan Anand, de 31 años, justificó plenamente el significado de su nombre (felicidad, en el idioma hindi) al proclamarse campeón del mundo oficial en Teherán tras derrotar al español Alexéi Shírov por 3,5-0,5. El indio, residente en Collado Mediano (Madrid), aprovechó con maestría y frialdad el ansia de su rival, quien se lanzó a un ataque tan espectacular como ineficaz en la cuarta partida de un duelo programado al mejor de seis. La Federación Internacional (FIDE) negocia un duelo entre Anand y el ruso Vladímir Krámnik, campeón del mundo oficioso, para unificar el título y terminar con el cisma que Gari Kaspárov provocó en 1993.Tras recibir una larga ovación del público iraní, que le aclamó como el primer asiático que logra el título, Anand habló por teléfono con EL PAÍS: "Shírov es increíble. Desde varias jugadas antes de su abandono, yo pensaba que mi posición era ganadora, pero él ha encontrado recursos inverosímiles para complicar la partida, obligándome a una defensa precisa hasta el último movimiento. Además, se ha portado como un caballero y me ha felicitado efusivamente".

Anand considera que el llamativo marcador no refleja la diferencia entre los dos finalistas: "El resultado es la consecuencia del estilo arriesgado de Shírov, cuya maravillosa creatividad debe completarse en el futuro con la sangre fría necesaria para este tipo de duelos. Creo que una de las claves está en mi larga experiencia en otros Campeonatos del Mundo. He jugado muy tranquilo, de lo que me siento sorprendido, y ello me ha permitido defenderme con precisión, aprovechando la agresividad de mi rival en mi favor".

El indio dedicó el triunfo a su esposa, Aruna, presente en Teherán, y al resto de su familia, que siguió las partidas por Internet desde Chennai, la antigua Madrás. También citó a sus padres españoles, Mauricio y Nieves Perea, que le convencieron en 1996 para trasladar su residencia a Collado Mediano, en la sierra madrileña. Y no olvidó a su entrenador, el georgiano Elizbar Ubilava, ni a su analista, el español Pablo San Segundo: "Su contribución es muy importante, no sólo por los cientos de horas que hemos trabajado juntos en mi casa durante todo el año, sino sobre todo por el apoyo psicológico a lo largo de las cuatro semanas que ha durado el Mundial. Con frecuencia, lo que se juega en el tablero tiene poco que ver con lo que has preparado, pero el trabajo en equipo hace que te sientas respaldado y aumenta tu confianza".

El campeón, que viajará a India antes de regresar a Madrid, no había bajado aún de la nube. "Supongo que necesitaré un par de días para darme cuenta de lo significa esto. El hecho de que la campeona del mundo y yo procedamos de dos países cuyo número de habitantes equivale la tercera parte de la población mundial abre un gran futuro para el ajedrez", agregó. De etnia tamil, casta bramán (la más alta) y religión hindú, el indio hacía honor al significado de su nombre. "Además, he mejorado mi karma, después de tantos años de sufrimiento para lograr este título", concluyó.

Blancas: Anand. Negras: Shírov.

1 e4 e6 2 d4 d5 3 Cc3 Cf6 4 e5 Cfd7 5 Cce2 c5 6 f4 Cc6 7 c3 Db6 8 Cf3 f6 9 a3 Ae7 10 h4 0-0 11 Th3 a5 12 b3 Dc7 13 Ceg1 a4 14 b4 fxe5 15 fxe5 Cdxe5 16 dxe5 Cxe5 17 Cxe5 Dxe5+ 18 De2 Axh4+ 19 Rd1 Df6 20 Cf3 Dxc3 21 Ab2 Db3+ 22 Rc1 e5 23 Txh4 Af5 24 Dd1 e4 25 Dxb3 axb3 26 Cd2 e3 27 Cf3 Tae8 28 Rd1 c4 29 Ae2 Ae4 30 Rc1 Te6 31 Ac3 Tg6 32 Th2 Ad3 33 Axd3 cxd3 34 Rb2 d2 35 Rxb3 Tg3 36 Rb2 g5 37 Rc2 Tc8 38 Rd3 g4 39 Ae5 Tc1 40 Th1 Txg2 41 Ch4, y Shírov se rindió.