El Parque de Sierra Nevada permitirá la caza privada de cabras para reducir a la población
El patronato del Parque Nacional de Sierra Nevada acordó ayer iniciar la reducción de la población de cabras y jabalíes. En varios años serán abatidos mediante caza controlada unos 5.000 ejemplares para evitar la propagación de enfermedades epidémicas y reducir los destrozos que los animales causan en cosechas y propiedades privadas. En las batidas podrán participar los propietarios de los cotos que perdieron esta condición cuando hace un año Sierra Nevada se convirtió en reserva nacional. Empresas y ayuntamientos solicitaron este año 6.000 millones en ayudas.
Todos representados
La viceconsejera de Medio Ambiente, Isabel Mateos, explicó ayer que en el parque nacional existen en la actualidad 14.000 cabras monteses, cuando la cifra ideal no debería superar las 9.000. Las reclamaciones de los propietarios de fincas por los destrozos que causa la sobrepoblación de cabras y jabalíes ha aumentado extraordinariamente en los últimos tiempos. A ello se une, según los técnicos, el peligro de expansión de enfermedades como la sarna de la población caprina.El patronato aprobó un plan para restringir la población de animales. Los responsables del parque permitirán abatir poco a poco los ejemplares sobrantes. La caza se hará de octubre a febrero, fuera de la época de cría, y no podrá tener fines lucrativos. Las batidas estarán controladas por los guardas del parque aunque podrán participar cazadores privados, en concreto los dueños de los cotos que dejaron de serlo cuando se produjo la declaración de parque nacional, el décimo de los existentes en España y el de mayor superficie.
El patronato también alcanzó un importante acuerdo: crear una comisión permanente que mejore la operatividad. El pleno del patronato, el órgano principal, está formado por representantes de la Administración central, la autonómica, los ayuntamientos incluidos dentro de los límites de protección, asociaciones y grupos ecologistas. El elevado número de miembros, según Isabel Mateos, impide un funcionamiento ágil.
Sin embargo, la distribución de los puestos en la comisión permanente ha sido hasta ayer un serio escollo para su constitución. Finalmente el pleno aprobó, a propuesta de un grupo de estudio formado por miembros del propio patronato, constituir una permanente con nueve miembros. Los ayuntamientos estarán representados por dos personas, el Ministerio de Medio Ambiente por una y la Junta de Andalucía por otra. El resto son grupos ecologistas y asociaciones vinculadas de algún modo al parque nacional.
"Lo importante", declaró Mateos, "es que estén todos los sectores representados y que el patronato, a través de esa comisión, sea un órgano activo". La viceconsejera de Medio Ambiente no ocultó las presiones y protestas que ha habido hasta consensuar la distribución de los puestos en el nuevo órgano, en especial por parte de los Ayuntamiento y de los diferentes grupos vinculados con Sierra Nevada.La comisión permanente se podrá reunir una vez que las Administraciones y los diferentes colectivos hayan designado a sus representantes. Las competencias de la comisión serán variadas pero quizá la más importante sea la selección de las ayudas que, desde el Ministerio de Medio Ambiente, se reparten anualmente a Ayuntamientos y a proyectos empresariales relacionados con el medio natural.
Si en 1999 las solicitudes de ayuda presentadas fueron pocas, en 2000 se incrementaron notablemente. Pero la diferencia entre lo solicitado y los concedido es abismal.
Ayuntamientos y empresas pidieron este año más de 6.000 millones de pesetas pero lo concedido apenas superó los 300. Aun así, señaló Mateos, esta cifra representa un 40% de las ayudas que el Estado distribuye entre los diez parques naturales. Mateos explicó que antes de dar curso a las peticiones, el patronato del parque hizo una criba y apartó todas aquellas peticiones que por algún motivo, ya fuera formal o de otro tipo, carecían de posibilidades.
Posteriormente, Junta y Gobierno central distribuyeron las subvenciones.
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