La Cámara ampara a la diputada 'verde' Gálvez

El presidente del Parlamento de Andalucía, Javier Torres Vela, anunció ayer la decisión de la Mesa de la Cámara de poner en conocimiento del Ministerio Fiscal el trato recibido el pasado martes en Marbella por la diputada verde Inmaculada Gálvez, que forma parte del grupo socialista.El acuerdo de la Mesa del Parlamento hace referencia al artículo 12 del reglamento de la Cámara que faculta al presidente "para adoptar las medidas que estime convenientes en orden a salvaguardar los derechos y prerrogativas de los parlamentarios".

En concreto, el Parlamento informará a la Fiscalía por el obstáculo de las funciones de Gálvez como parlamentaria que supuso el tratamiento por la Policía Local de Marbella a la parlamentaria el pasado martes.

Gálvez, miembro de Los Verdes, fue desalojada en volandas por varios policías locales de Marbella de la cafetería de un hogar del pensionista a la que había acudido para solidarizarse con Maribel Guerrero, la persona que la regentaba y a la que el Ayuntamiento marbellí le retiró la concesión administrativa.

Tras el desalojo de los concentrados, Gálvez denunció en comisaría al jefe de la Policía Local y a varios agentes por las lesiones que le causaron mientras la sacaban por la fuerza del bar, agarrada por las piernas y los brazos. Según certificó el médico forense, Gálvez sufrió hematomas y una contusión muscular en el glúteo derecho.

En su reunión de ayer, la mesa también expresó su protesta formal por el tratamiento recibido por Gálvez. Los miembros de la cámara, recuerda la declaración, "cuando se encuentran en el ejercicio de sus funciones representan a toda la comunidad autónoma y merecen la protección de las fuerzas del orden".

"Obstaculizar la labor de un parlamentario constituye un comportamiento antidemocrático injustificable en un Estado de Derecho", entiende la cámara.

"Si, además, se somete a dicha representante del pueblo a vejaciones de carácter indigno, como las que pudieran deducirse de las imágenes ofrecidas en distintos medios de comunicación, la repulsa del Parlamento debe expresarse con toda la contundencia y energía que merecen los actos de carácter incívico, impropios de una convivencia en libertad", añade el texto.

El alcalde de Marbella, Jesús Gil, aseguró ayer en un comunicado, según informa Efe, que la parlamentaria andaluza Inmaculada Gálvez "deshonra permanentemente" a la institución que representa, en alusión a los hechos ocurridos el pasado martes en el desalojo del bar Las Chapas.

En su comunicado, Gil afirma que la parlamentaria "perdió totalmente los nervios" cuando se puso a insultar a los agentes, que "la habían invitado de forma correcta y civilizada" a abandonar el local.

Gil destaca en su escrito que Gálvez "no respeta para nada su credencial política" e instó al Parlamento de Andalucía a que se informe del contendio del expediente abierto en el Juzgado de Instrucción número 2 de Marbella, "ante el simulacro de heridas o maltrato producto de su mente calenturienta en un amor excesivo en defensa de su protegida", en referencia a Maribel Guerrero.