La ampliación del aeropuerto que prevé Fomento implica aplazar la llegada del AVE a Barcelona

La llegada del AVE a Barcelona tiene un nuevo obstáculo: la ampliación del aeropuerto de El Prat prevista por el Ministerio de Fomento hace imposible que el tren entre en Barcelona en el año 2004. La oficina del plan director, cuyo titular es Francisco Gutiérrez, proyecta la estación del AVE en la nueva terminal, que no estará lista antes de ese año. Esto supone que la llegada del AVE por el aeropuerto a Sants quede pospuesta hasta 2005 o más tarde. Para evitarlo, los alcaldes defienden que la estación se sitúe en la terminal actual.

Inversiones en Madrid

La oficina del plan director del aeropuerto de Barcelona sólo conoce el plan de los alcaldes metropolitanos por lo que se ha publicado en la prensa, explicó un portavoz de aquélla. Esto supone que sigue trabajando con la hipótesis de que la estación del AVE se situará en la terminal que se construirá entre la pista actual y la futura tercera pista. Pero hay otras implicaciones: la tercera pista no estará terminada antes de finales del año 2004, en el mejor de los casos. De hecho, los documentos oficiales establecen un periodo de construcción para la nueva terminal que va desde principios de 2003 hasta mediados de 2005. Eso sin contar que los responsables del Ministerio de Fomento reconocen que el proyecto en general anda retrasado.Pero hay más. La entrada del tren de alta velocidad en la nueva terminal tiene que hacerse por debajo de la pista actual, lo que exige reducir drásticamente su capacidad de operaciones. Esto motiva que no sea posible iniciar estas obras antes de que esté terminada la tercera pista (finales de 2004, según las previsiones oficiales).

En la última reunión de la comisión de seguimiento del Plan del Delta del Llobregat (que incluye los trabajos de ampliación del aeropuerto) tanto el secretario de Estado, Benigno Blanco, como el presidente de AENA, Pedro Argüelles, reconocieron los retrasos en los trabajos relativos a la ampliación de El Prat, aunque a continuación hablaron de la voluntad de recuperar el tiempo perdido. La oficina del plan director, por su parte, negó rotundamente que haya retraso alguno.

El principal problema para ganar tiempo es la voluntad política. Y los representantes de las instituciones catalanas no acaban de ver claro que el Ministerio de Fomento tenga verdaderas ganas de ampliar El Prat. En este sentido, las declaraciones hechas ayer por el ministro Francisco Álvarez Cascos en el Congreso fueron calificadas por el alcalde de El Prat, Lluís Tejedor, de "mala noticia para las aspiraciones de Cataluña".

Álvarez Cascos aseguró que el Gobierno está decidido a construir un nuevo aeropuerto para Madrid en Campo Real y precisó que el plazo en el que puede empezar a funcionar es de entre 12 y 15 años. Mientras, añadió, se procederá a ampliar Barajas con la construcción de una cuarta pista. Salvador Sedó, diputado de CiU, expresó su preocupación por el hecho de que el Gobierno central decidiera invertir dinero en la ampliación de un aeropuerto (Barajas) llamado a ser desmantelado y sugirió destinar el dinero a otros aeropuertos. El ministro le respondió que, de no hacerlo, se perderían unos 18 millones de pasajeros al año, y pasó por alto la posibilidad de que la ampliación se hiciera en otro punto. No obstante, el diputado popular Fernando López Amor dio la clave para entender el futuro al referirse al aeropuerto de Madrid como "el aeropuerto del país", pasando por alto la posibilidad de que haya dos aeropuertos en igualdad de condiciones como reclaman las instituciones catalanas.El anuncio del ministro, precisó Tejedor, significa que el Gobierno central no prevé en modo alguno el desarrollo de El Prat como aeropuerto hub (aquel desde el cual se redistribuyen pasajeros hacia otros destinos) y en ese sentido es mala noticia para Cataluña.

De modo muy similar se expresaron los diputados autonómicos Manel Nadal (PSC) y Carles Bonet (ERC), y también el presidente del Consejo Comarcal del Baix Llobregat, José Luis Morlanes.

Morlanes precisó que sería conveniente que el ministerio se definiera de una vez sobre si el AVE entrará en Barcelona por el sur directamente desde el aeropuerto y abandonara la opción de paso por Cornellà. "La verdadera discusión no es si la estación tiene que estar en una terminal o en otra, sino cuándo y por dónde tiene que pasar. Y tiene que hacerlo por el aeropuerto y por Sants".

Los retrasos en el plan director del aeropuerto de El Prat se deben, en parte, a los cambios que se han producido en el Ministerio de Fomento. El director del plan, Francisco Gutiérrez, tenía la confianza plena del ex secretario de Estado Albert Vilalta, pero no tiene la misma relación con Benigno Blanco. Sabedor de que tiene menos peso en el ministerio, Gutiérrez consulta sistemáticamente todas las decisiones, lo que supone también retrasarlas. Al mismo tiempo, se ha enfriado la relación con las instituciones catalanas. El propio alcalde de Barcelona, Joan Clos, aseguraba hace unas semanas que no sabe nada de cómo están los trabajos de ampliación del aeropuerto.