Veinte años sin Lennon
Al recordar el 9 de diciembre de 1980 siento de nuevo el estupor, la rabia, la tristeza y el desconsuelo que la noticia del asesinato de John Lennon me produjo. Aquella tarde paseaba por una ciudad que no era la mía y me llegaban los ecos de las canciones de los Beatles que la radio difundía. Tuve una sensación contradictoria: nadie a mi alrededor comprendía mi aflicción y, sin embargo, sabía que millones de personas en todo el mundo se habían quedado abatidas y un poco huérfanas.Tardé meses en habituarme a su ausencia. Entonces lamenté, más que nada, la pérdida irremediable de las canciones que Lennon aún tenía que ofrecer. ¡Qué más daba que sus composiciones no hubiesen sido tan buenas como las de los años sesenta!
Ahora, 20 años más tarde, lo que más me apena es que un desequilibrado truncase en su plenitud la vida irrepetible de John Winston Lennon -compositor, músico, cantante- e intentase acabar con los sueños de toda una generación.-