Las carreteras suman atascos cercanos a los 200 kilómetros en el retorno del puente

Las carreteras de entrada a la región se convirtieron ayer de nuevo en una trampa para los miles de conductores que regresaban del largo puente de la Constitución y de la Inmaculada. Las principales autovías registraron retenciones que alcanzaron, en total, casi los 200 kilómetros. Los problemas se produjeron ya desde primera hora de la tarde en las provincias límitrofes, en especial, en Toledo y en Segovia, según informó la Dirección General de Tráfico (DGT). La peor parte se la llevaron las carreteras de Extremadura (N-V) y de Andalucía (N-IV).

Víctimas

Los problemas en la carretera de Extremadura comenzaron a partir del mediodía en Toledo. A la altura de Cazalegas, Valmojado y Santa Olalla, los conductores tuvieron que soportar tráfico lento y paradas intermitentes a lo largo de 37 kilómetros. Esos vehículos fueron entrando poco a poco en Madrid, lo que motivó nuevos atascos por la tarde en dos puntos de la N-V: Navalcarnero, con ocho kilómetros, y Alcorcón, con otros cuatro. El problema se da en este último punto porque los vehículos que acuden a la zona comercial Parque Oeste Alcorcón suelen colapsar la salida por la autovía. Además, los conductores deben elegir entre la M-40 o continuar por la carretera de Extremadura para acceder a la capital.La carretera de Andalucía tuvo su particular punto negro en las curvas de Valdemoro, donde se registraron atascos durante 17 kilómetros, según la DGT. Los vehículos soportaron antes 24 kilómetros de paradas intermitentes en Ocaña (Toledo). Este punto es especialmente conflictivo porque a los conductores que intentan llegar a Madrid desde el sur de la Península se unen los vehículos que provienen de Levante. La subida de la cuesta de la Reina, en Aranjuez, se sumó a última hora a los problemas de esta autovía.

Un panorama similar se vivió en la autovía de A Coruña (A-6), ya que los coches tropezaron en la provincia de Segovia con su primera retención. Ocurrió, como ya es habitual en estas operaciones de regreso, en el peaje de San Rafael, donde hubo 23 kilómetros de retenciones. Esta situación empeoró alrededor de las ocho de la tarde hasta los 28 kilómetros. En algunos momentos, los coches estuvieron parados durante largo rato. Ya en la región, los vehículos encontraron otro tapón de seis kilómetros en Collado Villalba. Estos atascos aumentaron durante la tarde hasta los nueve kilómetros, según informó la DGT.

En la zona de la sierra también hubo problemas meteorológicos en Navacerrada y en Santa María de la Alameda. En las carreteras M-601 y M-505 hubo 12 y 9 kilómetros de densa niebla que dificultó el acceso de los madrileños que regresaban del largo puente.

La autovía de Burgos (N-I) comenzó a tener problemas desde las cuatro de la tarde a la altura de El Molar, con 13 kilómetros de atascos. Después hubo tráfico lento en Colmenar Viejo, con seis kilómetros, y en San Sebastián de los Reyes, con otros seis.

El paso por Arganda, en la carretera de Valencia (N-III), estuvo con tráfico lento durante toda la tarde. El acceso desde Fuentidueña del Tajo, entre los puntos kilométricos del 58 al 61, también sufrió atascos a última hora de la tarde de ayer, según Tráfico. Esta autovía también tuvo como paradoja que el tráfico denso y lento se dio de salida. Los vehículos procedentes de Valencia, Cuenca y Alicante, cuyos ocupantes pasaron el fin de semana en Madrid, sufrieron retenciones de salida, sobre todo, en la intersección con la vía de circunvalación M-40.

La carretera de Toledo (N-401) fue una de las mejores en la operacion retorno. Tan sólo se produjeron atascos en dos kilómetros a la altura de Parla. La excepción a este rosario de retenciones se produjo, según Tráfico, en la autovía de Barcelona (N-II), donde el tráfico fue fluido.

Durante todo el puente se han registrado tres víctimas mortales en dos accidentes. El primero ocurrió el jueves en el kilómetro 48 de la M-505, en Valdemaqueda, donde fallecieron dos personas que viajaban en el mismo vehículo. El segundo ocurrió a la 1.55 de ayer en la carretera de Extremadura (N-V), en Madrid, donde falleció un joven de 22 años.