El PNV califica el acuerdo contra ETA de "excluyente, estrambótico y poco oportuno"

"Excluyente, estrambótico y poco oportuno". Josune Ariztondo, secretaria de la ejecutiva del PNV, expresó así ayer su rechazo al acuerdo antiterrorista firmado por el PP y el PSOE. Las tres fuerzas nacionalistas vascas (PNV, EA y EH) se desmarcaron del acuerdo alcanzado por los dos principales partidos. Mientras desde EA se reivindicaban los principios democráticos de Lizarra, desde Herri Batasuna, Arnaldo Otegi lo calificaba de "declaración de guerra en toda regla". Pese a las críticas, populares y socialistas vascos dejaban la puerta abierta a nuevas adhesiones.

El acuerdo de PP y PSOE tiene de frente a todo el nacionalismo vasco, tanto el democrático como el violento. La línea expresada por Xabier Arzalluz, presidente del PNV, el pasado martes impera en su partido: "Vuelven a cometer el mismo pecado que cuando nos apartaron de la ponencia constitucional". Las llamadas de las fuerzas constitucionalistas al principal partido vasco a abandonar las tesis soberanistas, el Pacto de Lizarra, y entrar en la senda constitucional, no recibieron por parte del PNV sino un nuevo desplante.Ariztondo señaló que su partido tiene una propuesta política en la que lleva varios meses trabajando y que mientras las bases, la ejecutiva y la asamblea nacional del partido no lo decidan, no se cambiará.

Los nacionalistas en línea con las palabras de Arzalluz -"¿Nos van a invitar al café?"- señalaron que se han visto esencialmente excluidos: "No se entiende que un pacto con un objetivo tan importante como es la búsqueda de la paz se haga de esta manera, sin contar con otros partidos, sean del tamaño que sean, y tengan la importancia que tengan". Ariztondo, que lamentó que los invitados a firmar estén sujetos a las condiciones de los que lo han redactado, señaló que el acuerdo es "lo más estrambótico de toda la historia de la democracia".

Ante el llamamiento "solemne" de Nicolás Redondo Terreros, secretario general del PSE-EE, a que los nacionalistas olviden el periodo de dos años en el que han basado su política en Lizarra y se sumen al acuerdo, Ariztondo dijo que no era una petición tan solemne si se hacía a través de los medios de comunicación. La dirigente nacionalista, tras asegurar que su partido "nunca ha dejado de recoger el mestizaje" de la sociedad vasca, dijo que el acuerdo "muestra una falta de consideración a la pluralidad vasca".

Las manifestaciones de Ariztondo no valoran que en el Pacto de Lizarra la única fuerza no nacionalista que lo firmó fue Izquierda Unida, minoritaria en Euskadi con sólo dos parlamentarios de 75 en la Cámara vasca.

A por la suma

Redondo defendió que el único planteamiento serio que tiene el PNV es el de estar en su lado: "Espero que con el tiempo y con la ayuda de los ciudadanos estén donde siempre estuvieron". Una tesis parecida defendió el portavoz parlamentario vasco del PP, Leopoldo Barreda, que dijo que era un acuerdo para sumar.Más próximo a los planteamientos del PNV que a los de socialistas y populares, se situó el coordinador general de IU-EB en Euskadi, Javier Madrazo, quien señaló que el acuerdo no iba a servir "para nada", sino para generar "más división, más frentismo y más fosa entre el nacionalismo español y vasco". Madrazo, que se siente también excluido, colocó el acuerdo en "parámetros de pre-Ajuria Enea". Así, señaló que no van a hacer "seguidismo de nadie", que tienen sus propuestas propias.

Aprovechando la tempestad entre los nacionalistas democráticos y los constitucionalistas, el portavoz de EH, Arnaldo Otegi, afirmó que el pacto antiterrorista suscrito entre PP y PSOE "es una declaración de guerra en toda regla" de las fuerzas "unionistas". Tras hacer una llamada a la unidad nacionalista, atacó al PNV mostrando su desconfianza y asegurando que "cumplimentará la nueva exigencia" del PP y del PSOE contra Lizarra.

El dirigente de la coalición abertzale próxima a ETA dijo que se trata de "una vuelta atrás y una manifestación más de la escasa, nula y ninguna vocación de PP y PSOE por incorporar a sus propuestas políticas soluciones democráticas al conflicto vasco".