Otra más en la nueva hornada

Merche Peris (Valencia, 1985) forma parte de la nueva hornada de deportistas valencianos de élite, entre los que se encuentra la saltadora Concha Montaner, el mediofondista José Antonio Redolat o el tenista Juan Carlos Ferrero. Nadadora del Dom Bosco, estudiante de cuarto de ESO, afronta con 15 años su primera competición internacional absoluta: el campeonato de Europa en piscina corta, que se disputará en Valencia del 14 al 17 de diciembre. Ojo, viene a decir uno de sus entrenadores, Juanjo Romero, esta chica es harina de otro costal. Y no sólo por sus marcas (30,60 en 50 metros espalda; o sea, la segunda mejor marca nacional de 2000, sólo superada por la rusa nacionalizada española Nina Jivanevskaia). También por su desparpajo, su depurado estilo: flotabilidad, potencia de piernas, propulsión de los brazos. Pues sí. Cualquier experto se daría cuenta en un periquete de que esta chica tiene un enorme talento. "Bueno, estoy empezando ahora a darme cuenta... sí, quizá esté un poco asustada", dice Merche, que se entrena unas cinco horas diarias en la piscina del colegio Salesianos. En el campeonato de Europa nadará junto a la rumana Diana Mocanu, de apenas 16 años, campeona olímpica en Sydney de 100 y 200 metros espalda. No será la primera vez que coincida con ella. Ya lo hizo en el campeonato de Europa junior, disputado el pasado mes de julio en Dunkerque (Francia). También estará Nina Jivanevskaia, bronce en los 100 metros espalda en los últimos Juegos, y la francesa Roxana Maracineanu, plata en 200 espalda en Sydney. "Me impresionó mucho Mocanu en Dunkerque, pero no sé... son como mis ídolos, y pensar que voy a estar con ellos...", murmura la joven nadadora valenciana. "Está acongojada", bromea su padre, Rafael Peris, presidente del Dom Bosco. "Qué va", responde rauda Merche.Con sólo 13 años, Merche Peris disputó el campeonato de España absoluto y a punto estuvo de clasificarse para la final. Pero ya hacía años que despuntaba. "Lo digo con la boca pequeña, pero creo que estamos ante una nadadora olímpica", afirma Manu Miralles, quien junto a Juanjo Romero entrena a los nadadores del Dom Bosco. "Tiene un don especial para la natación", abunda Miralles. Ahora, Valencia, campeonato de Europa en piscina corta; después el campeonato de España absoluto; el próximo verano el Mundial de Edmonton (Canadá). "Bueno, bueno, vamos paso a paso, no hay que atosigarla", dice Juanjo Romero, consciente de la dureza de la natación, los sacrificios, y la posterior frustración de un entrenador por los numerosos abandonos que se producen. Pero también consciente de que están ante un diamante en bruto, una nadadora que ha levantado muchas expectativas, que aún está formándose. "Éste es el primer año que Merche trabaja con pesas", cuenta Miralles. El llamado trabajo en seco, fundamental en cualquier nadador, imprescindible en los velocistas. Y Merche, muy completa, estilizada, 177 centímetros de altura, todavía tiene que mejorar su potencia en las piernas, los virajes. "Merche tiene unos primeros 25 o 30 metros explosivos, pero hay que trabajar mucho todavía, porque también tiene que mejorar en 100 e incluso 200 espalda. Ahora, de todas formas, hay que tener mucha paciencia, porque las mejoras son mínimas", señala Miralles.

Bien, pues si estamos hablando de una nadadora olímpica, quizá en Atenas 2004, habrá que ver qué dice ella. "Quiero dar lo máximo que pueda, ir poco a poco", dice Merche, que asegura disfrutar con el entrenamiento, las continuas series de 100 metros, las dobles sesiones, las pesas. Y su padre, qué dice: "No le gusta perder ni a las canicas".