De los progenitores
¿Se imaginan una familia de clase media acomodada, sin ninguna deuda pendiente, con aportaciones económicas de sus miembros que les permiten mantener cierto nivel de ahorro y viviendo en una casa que se encuentra en las siguientes condiciones?:- Vivienda en propiedad construida hace 70 años (de tiempos de la República).
- Con grandes ventanas metálicas de dicha época, cristales sencillos y orientadas al norte, por las que se pierde el 70% de la escasa calefacción de que está dotada.
- Las habitaciones de los más pequeños de la familia, de tres y cuatro años, en pleno invierno no superan los 10º C, por lo que los niños tienen que estar en sus habitaciones con abrigo.
- Una habitación de la vivienda padece importantes grietas y desprendimientos de los elementos constructivos, por lo que el padre, arquitecto de profesión, ha prohibido que dicha habitación sea utilizada por nadie, y como consecuencia sea desalojada, ya que el peligro es inminente. Por ello, el hijo que ocupaba dicha habitación es reubicado en el pasillo.
- A todo esto, las necesidades de espacio de la familia ya les ha obligado a utilizar el pasillo como sala de estudios, la mesa del comedor se desmonta cuando la familia quiere reunirse ante el televisor, etcétera.
Como comentario final, decir que nada de lo comentado se encuentra en vías de solución y que el deterioro de la vivienda va en aumento. Todo esto y mucho más es lo que está ocurriendo en el colegio público José Calvo Sotelo, de la avenida de la Ciudad de Barcelona, 83 (Pacífico), donde los "cabezas de familia" son la Comunidad Autónoma de Madrid y el Ayuntamiento de Madrid (administraciones a las que les viene sobrando dinero del Presupuesto en cada ejercicio). ¡Qué progenitores tan irresponsables, que con un buen nivel de ingresos tienen a su familia en estas condiciones! Pero eso sí, sus hijos tienen varios ordenadores (sin desembalar), esto les hace quedar muy bien con el vecindario.-
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.