Un estudio propone verter los escombros del túnel del tren veloz en Guadalix

No obstante, el estudio recuerda que "no existe ninguna referencia en las normas subsidiarias [de Guadalix] en cuanto a protección de patrimonio arqueológico en la zona considerada, pero es conventiente la realización de un peritaje arqueológico antes de proceder al movimiento de tierras".El informe propone dividir los residuos que se sacarán del túnel por la parte de Segovia (dos millones de metros cúbicos) en dos ubicaciones: el municipio de la Madrona y el de Tres Casas, en el kilómetro 8 de la carretera de la La Granja. "Ambos vertederos son alternativos, pues su morfología es un valle ciego y por la hombrera serrana de su cabecera discurre la Cañada Real Soriana, lo que hace que queden perfectamente cobijados y enrasados", concluyen.

Modesto Nolla, diputado regional del grupo PSOE-Progresistas, denunció ayer el "oscurantismo del Ministerio de Fomento en este asunto". "Lo que debe hacer Fomento es minimizar el impacto ambiental de los residuos, mediante la reutilización de los materiales en la construcción de nuevas infraestructuras o la restauración de canteras".

Nolla recuerda que, según el informe, el 90% del material extraído será granito, "un material idóneo para carreteras, plataformas ferroviarias o como elemento para mezclarlo con el hormigón". "El Gobierno de Madrid no puede cerrar los ojos ante este posible desastre medioambiental", concluye.

Por su parte, Óscar Monterrubio, miembro del Consejo Asesor de la Sierra Norte (entidad que agrupa a los 42 municipios de esta parte de la Comunidad) y alcalde socialista de Robregordo, manifestó ayer que "la sierra norte reclama una explicación oficial de qué va a hacer Fomento con los residuos". "Queremos que una parte de los escombros salga de la sierra. En la zona existe preocupación y exigimos una solución y un planteamiento global para estos vertidos: primero horadan la sierra y luego dejan los residuos en ella". Monterrubio anunció próximas reuniones entre los representantes municipales de esta zona de Madrid para presentar una "estrategia conjunta" frente al ministerio.

Fomento rechazó ayer dar a conocer oficialmente el nombre del pueblo elegido para recibir los residuos "hasta que se haga pública la declaración de impacto ambiental de la obra". El Ministerio de Medio Ambiente utilizó argumentos semejantes cuando se le preguntó sobre el lugar designado para almacenar los escombros procedentes de la obra. "Esa información debe darla Fomento", indicó un portavoz.

Por su parte, el Gestor de Infraestructuras Ferroviarias (GIF), organismo dependiente de Fomento y sobre el que recae la responsabilidad de los futuros trabajos del tren veloz, declinó hacer declaraciones.

No obstante, un comunicado oficial del Ministerio de Fomento admite por primera vez que las obras originarán 7,8 millones de metros cúbicos de tierra y que se prevén "diversos escenarios posibles con un tratamiento diferenciado en las dos vertientes de la sierra" (la madrileña y la segoviana).

Fomento explica que se utilizarán "canteras y zonas degradas, que se proponen prioritariamente como depósito de excedentes, aunque no se excluyen vertederos de nueva creación con posterior recuperación ambiental de las zonas de vertidos". El ministerio calcula que se extraerán 4,5 millones de metros cúbicos por la boca norte y 3,3 millones por el sur (ocuparía el volumen de un estadio de fútbol de 800 metros de altura).

Por su parte, Santiago Martín Barajas, portavoz de la asociación Ecologistas en Acción, recuerda que la zona de Guadalix donde el estudio propone verter los residuos es un "área de pastizales de transición entre los encinares y robledales, muy rica a nivel medioambiental". "El estado del valle de Guadalix es, en general, muy bueno", continuó, "meter los escombros es simplemente una salvajada".