El Gobierno catalán se suma a las alegaciones municipales sobre el AVE

Los municipios del área metropolitana de Barcelona afectados por el trazado del AVE presentarán todos las mismas alegaciones y pedirán al Gobierno catalán que se sume a ellas para defenderlas ante el Ministerio de Fomento. El Ejecutivo que preside Jordi Pujol dio ayer un paso para sumarse al frente al anunciar que rechaza el paso por Cornellà y que defiende una estación singular en Sagrera y que quiere un plan de Cercanías.

El consejero de Política Territorial, Pere Macias, presentó ayer la posición oficial del Gobierno catalán sobre el trazado del AVE por Barcelona sometido a información pública por el Ministerio de Fomento. La tesis de Macias fue clara: "El consenso es muy importante y estamos acercando posturas minuto a minuto tanto con el Ayuntamiento de Barcelona como con Fomento".Aunque el Gobierno catalán mantenía ayer unas alegaciones diferenciadas, contra lo que le reclaman los municipios, lo cierto es que se hallan muy cerca de las peticiones municipales.

Las tesis defendidas ayer por Macias empiezan por el aeropuerto. El Gobierno catalán descarta el atajo por Cornellà y reclama que el tren llegue a El Prat. Los 19.000 millones de pesetas que se ahorran al no pasar por Cornellà se destinarían, dijo Macias, a mejorar la red de Cercanías. Las obras en estas líneas se harían al mismo tiempo que las del AVE e incluirían una línea de circunvalación por el Vallès con vértices en Granollers y Martorell y con trenes en ambas direcciones.

El ahorro de Cornellà daría también para soterrar la línea de alta velocidad en Barcelona, haciéndola pasar bajo la ronda del Mig, como piden los vecinos.

El Gobierno catalán cree imprescindible la creación de un consorcio para dirigir la construcción de la estación de Sagrera, que debe ser un edificio singular, y también el desarrollo urbanístico de la zona, donde Fomento deberá cubrir las vías respetando el plan urbanístico.

El tercer túnel, bajo la calle de Mallorca, es una idea excelente, dijo Macias, que debe ser mantenida. El Gobierno catalán ha defendido siempre que este túnel debe ser para los trenes de Cercanías, que ahora pasan por Aragó. Bajo esta calle circularían los trenes de alta velocidad y los regionales. Ayer, Macias aceptó la posibilidad de que sea a la inversas, como defiende el Ayuntamiento de Barcelona, a condición de que éste encuentre una solución para el cruce de vías que limita los servicios de Cercanías. El primer teniente de alcalde, Xavier Casas, aseguró en la sede de la patronal catalana, Fomento del Trabajo, que esa solución ya ha sido encontrada.

Alcaldes de Tarragona

Mientras tanto, los alcaldes de las comarcas de Tarragona afectados por el trazado del AVE se reunieron ayer en Barcelona con Pasqual Maragall. Todos coincidieron en aceptar la alta velocidad, pero exigiendo que se les dote de trenes convencionales. "No vaya a ser que veamos pasar el tren y no podamos coger ninguno", dijo uno de ellos. Todos coincidieron en que Fomento debe garantizar estas inversiones en un pacto escrito.