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Santander estudia retirar de sus calles los símbolos franquistas

Una subcomisión del Ayuntamiento de Santander, dependiente de la de Cultura, se encargará de estudiar la retirada de los símbolos franquistas de las calles y las plazas de la ciudad y, de acuerdo con una propuesta de la oposición, recabará la ayuda de expertos del departamento de Historia Contemporánea de la Universidad de Cantabria, que podrían elaborar un informe con la intervención del cronista oficial de la villa.Un grupo de profesores participantes en un curso sobre La mirada retrospectiva de la historia, celebrado en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo, hizo en agosto pasado un llamamiento a las fuerzas políticas para la adopción de lo que llamaron "una posición clara y rotunda" ante la existencia de numerosos vestigios de la Guerra Civil en el casco urbano que llamaron una "rémora anómala". Diez monumentos recuerdan la victoria de un bando sobre otro y en algún caso se rinde homenaje a la Italia fascista, cuyos símbolos son todavía visibles en una plaza de El Sardinero.

El pasado 28 de septiembre, los concejales populares y regionalistas rechazaron por 17 votos contra ocho una moción del grupo socialista para que fuesen adoptados los acuerdos precisos para la erradicación de cuantos vestigios exalten los valores militares del bando franquista.

El alcalde, Gonzalo Piñeiro del PP, rechaza, en contra de las tesis socialistas, que tales huellas produzcan violencia en la mayoría de los ciudadanos, aunque no oculta que ciertas frases esculpidas pueden haberse olvidado dado el tiempo transcurrido o porque no se les presta atención.

Piñeiro, que aún no se ha fijado ningún plazo para resolver el problema, se declara dispuesto a hacer desaparecer las frases ofensivas y a retirar los escudos preconstitucionales visibles en monolitos y estatuas.

En la reunión de ayer la oposición (PSOE e IU) reiteró su disposición a lograr un consenso que permita la retirada de tales símbolos recuperando los nombres que las plazas y las calles tenían antes de la Guerra Civil. Populares y regionalistas se abstuvieron de presentar propuestas.

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