La Comisión Europea admite los derechos de los 'comunitarios B'

Los comunitarios B recibieron ayer un respaldo en sus reclamaciones ante el Consejo Superior de Deportes (CSD) para que se les conceda el mismo trato laboral que a los jugadores nacidos en la Unión Europea. La comisaria de Trabajo y Asuntos Sociales, Anna Diamantopoulou, respondió en el Parlamento Europeo a una pregunta formulada por Gerardo Galeote, eurodiputado del Partido Popular. La contestación fue inequívoca: "Los trabajadores de los países candidatos con un empleo legal en un Estado miembro deben recibir el mismo trato que los nacionales de este Estado miembro, por lo que se refiere a las condiciones laborales, la remuneración y el despido".Estas condiciones reúnen siete jugadores de la Liga ACB: dos del Real Madrid, dos del Barcelona y tres del Tau de Vitoria (aunque Mills se ha lesionado para toda la temporada). Hasta ahora el CSD les ha impedido jugar en calidad de comunitarios argumentando que no hay base jurídica ni legal para cambiar de opinión.

Los países afectados por los tratados con la UE son once. Entre ellos no se incluye Túnez, a pesar de que el Ciudad Real de balonmano ha tratado de unirse a la reclamación con un jugador suyo de esa nacionalidad. Ante esta nueva situación, la ACB espera un cambio en la decisión del CSD y que permita a los jugadores aludidos disputar la próxima jornada de Liga. De ser así, provocaría un efecto dominó sobre otros deportes en España.

Se da la circunstancia de que el Tau recibirá el sábado al Barcelona, con cuatro jugadores involucrados en el caso. El presidente del Tau, Josean Querejeta, reaccionó ayer a las palabras de la comisaria europea y exigió a Juan Antonio Gómez Angulo, presidente del CSD, que anule la suspensión de las licencias de los comunitarios B de inmediato. De lo contrario, anunció que pedirá su dimisión. Ernesto Segura de Luna, presidente de la Federación Española de Baloncesto, manifestó ayer que el pronunciamiento de la Comisión Europea no aporta nada nuevo al conflicto y que la ACB está "mareando la perdiz".