Roger Peyrefitte, diplomático y novelista

Su irrupción en el mundo literario fue escandalosa y marcó su destino: en 1944, con Les amitiés particulières, Roger Peyrefitte ganó el Premio Renaudot, miles de lectores, el respaldo de André Gide y un oficio, pero, al mismo tiempo, liquidó su carrera, la diplomática, iniciada en 1930 y que le había llevado a ser secretario de embajada en Grecia. La diplomacia francesa estimó peligroso o inadecuado mantener en su seno a un joven que confesaba abiertamente su homosexualidad y que la convertía en materia novelesca en un texto que evocaba sus experiencias en un internado dirigido por los jesuitas.Los dos protagonistas, Georges y Alexandre, ven cómo sus amores son descubiertos por el padre Trennes y cómo todo el embrollo acaba por costarle la vida a Alexandre, que se suicida. Les amitiés particulières lograban dar una dimensión trágica a un enfrentamiento entre lo puro y lo impuro y obtuvo un gran éxito en una Francia que salía del corsé moralizante de los años de ocupación y de dominio del conservadurismo petainista. En sus siguientes libros, Peyrefitte habló de Grecia, de su contacto con el mundillo de los arqueólogos, y volvió a escandalizar a quienes piensan que la literatura existe para transmitir buenos sentimientos al publicar La mort d'une mère (1950), una novela en la que cuenta que no se siente en ningún momento la necesidad de acudir a la cabecera de la cama de su madre moribunda.

Durante los años cincuenta, Peyrefitte arremetió contra la hipocresía reinante en la vida privada de los diplomáticos. En Les ambassades y La fin des ambassades (1951 y 1953) aparecen retratados numerosos altos funcionarios franceses. Cinco años después serán las órdenes religiosas las que sepan del escalpelo del escritor y la curia romana o la orden de los caballeros de Malta son protagonistas a su pesar de otros dos libros de éxito. Los masones y las supuestas complicidades entre los judíos también interesaron al escritor, cada vez más empeñado en una visión conspirativa del mundo y dado a explicarlo todo a partir de los intereses ocultos de los grupos de presión.

En 1962, Roger Peyrefitte fue readmitido en el Cuerpo Diplomático gracias a una orden gaullista. Su obra se hizo más documentada y menos novelesca, sus conocimientos como helenista desembocaron en La jeunesse d'Alexandre (1978) y en otros dos volúmenes en los que aborda la vida de Alejandro Magno. En el transcurso de sus últimos años de actividad literaria compaginó una voluntad de memorialista a la manera de los del siglo XVIII con su admiración por la Grecia clásica, sin que eso le impidiese alguna excursión por la más estricta contemporaneidad, como en Fernand Legros, libro en el que se interesa por el universo de los marchantes de arte. Peyrefitte, que tenía 93 años y había nacido en Castres, en el sur de Francia, murió ayer en París.-