Dos accidentes obligan a paralizar las obras del 'metrosur' en Móstoles

Un nuevo accidente laboral, el segundo en un par de semanas, provocó ayer la paralización de las obras del metrosur en la plaza del Pradillo de Móstoles, por orden del alcalde, José María Arteta, del PSOE, primero, y del consejero regional de Obras Públicas, Luis Eduardo Cortés, del PP, después. La pluma de una grúa, de unos 40 metros de longitud, se desplomó, hacia las 9.45, sobre una acera de la avenida del Dos de Mayo. No hubo heridos, aunque dos peatones y el conductor de la grúa sufrieron crisis nerviosas.

"Si bien es cierto que no ha habido que lamentar desgracias personales y que los daños materiales han sido menores , las consecuencias del accidente han podido ser realmente graves, puesto que la pluma ha caído sobre una zona muy transitada del municipio", advierte el oficial jefe de la policía local en el informe de los hechos. El regidor no dudó un instante al saber del nuevo derrumbe: "Yo había pasado por allí hacía sólo unos minutos y, en cuanto me he enterado, he firmado un decreto de paralización de las obras", dijo. Los trabajos de construcción de la estación más céntrica del suburbano en Móstoles no se reanudarán "hasta que la Comunidad de Madrid facilite un informe detallado de las causas del accidente y determine qué medidas de seguridad piensa tomar", remarcó Arteta.

El consejero de Obras Públicas manifestó ayer que confía en que la paralización dure "sólo unos días". "La grúa pertenece a una de las empresas más sólidas y solventes, que trabajan no sólo en España, sino por todo el mundo, Rodio, pero los incidentes ocurren en cualquier momento y situación", señaló, tratando de buscar una justificación del accidente. "Me figuro que habrá sido por un fallo en la propia maquinaria", aventuró Cortés, hipótesis que choca con otros datos facilitados por el propio consejero: la grúa siniestrada había pasado "las revisiones pertinentes" en julio y el 30 de octubre.

Causas aparte, no es el primer sobresalto que el metrosur da a los mostoleños que pasean o trabajan (comerciantes, taxistas y obreros) en la zona del Pradillo. Hace dos semanas, la caída de un panel de hierro que pesaba 30 toneladas provocó un socavón y el consiguiente vuelco de la grúa que lo manejaba. Entonces, el conductor se libró, de un salto, de perecer aplastado. Y, por fortuna, la grúa cayó dentro del recinto acotado para las obras.

La pluma de ayer se precipitó a la altura del número 8 de la avenida del Dos de Mayo, "invadió 12 metros de calzada, se llevó por delante 2 árboles y aplastó 9 metros de cerramiento de las obras", pormenorizó el alcalde. "Y había muy cerca obreros de otra empresa que se encarga de las obras de remodelación del centro de Móstoles", añadió.