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Clos acusa a Fomento de buscar excusas para no construir el AVE en Barcelona

Joan Clos aseguró ayer que tiene la sensación de que el Ministerio de Fomento busca excusas para justificar que Barcelona no tenga el AVE en el año 2004. Tras recordar que se trata de un compromiso contraído por el propio ministro, Francisco Álvarez-Cascos, y por los presidentes del Gobierno central, José María Aznar, y de la Generalitat, Jordi Pujol, el alcalde de Barcelona añadió que no acaba de ver voluntad real de terminar las obras en los plazos previstos. Más aún, cree que el trazado sacado a información pública por Fomento garantiza que no sea así. "En el año 2004", afirmó, "el tren llegará a Sants y nada más".Los argumentos sobre falta de recursos insinuados por el ministro son, en opinión de Clos, inconsistentes. "Pretenden construir un túnel para Cercanías y una estación nueva sin decirnos de dónde sale el dinero para todo esto, que cuesta muchísimo dinero, y luego dicen que no lo hay para el AVE".

Clos utilizó ayer palabras de grueso calibre para defender la llegada del AVE al aeropuerto, Sagrera y Francia en 2004. Acusó al ministro de traicionarle y aseguró que el acuerdo sobre la base del proyecto conocido es "imposible".

Clos dice que el trazado del AVE dinamita el reequilibrio de Barcelona

"El trazado del AVE no es un problema ferroviario sino urbano". Joan Clos, que pronunció ayer un conferencia en el Colegio de Ingenieros sobre el AVE, entiende que Barcelona lleva 20 años programando un reequilibrio territorial que dé alas al desarrollo de la zona norte de la ciudad. Y esto pasa por una estación de verdad en Sagrera. "Hemos desmantelado la estación de França y la del Norte porque se iba a construir Sagrera y ahora el ministerio viene con excusas" y presenta un proyecto que dinamita el reequilibiro buscado. Clos añadió que la Sagrera es el eje sobre el que bascula el desarrollo de Santa Coloma y Badalona, Nou Barris y Poblenou, además de Sant Andreu-Sagrera.Clos afirmó estar dispuesto a negociarlo todo menos tres cosas: que el aeropuerto se halle en el tronco central del recorrido (lo que implica que no se haga el desvío por Cornellà), que Sagrera sea una estación completa y que todo funcione en 2004. "Barcelona no quiere ser una estación terminal de Madrid sino una estación central europea. Y para mostrar esa vocación, hemos decidido que la estación de Sagrera se llame Europa".

Clos se preguntó si quienes han decidido trasladar la estación de paseo de Gràcia a Provença han pensado en el coste que representa una obra así para la ciudad. Pero lo peor, dijo, es que se hace sin un plan de Cercanías.

Clos explicó que los planos sacados a información pública hacen imposible que el tren llegue desde Sagrera a França antes de 2006 y que, en L'Hospitalet, sólo hay una vía para entrada y salida del AVE.

Acabada la conferencia se abrió un turno de palabras intervino el alcalde de L'Hospitalet, Celestino Corbacho quien aseguró que el futuro de la ciudad pasa, inexcusablemente, por el soterramiento de las vías. Por L'Hospitalet, explicó, pasan cada día mil trenes que no paran en la localidad. Ya es hora de resolver el problema.

También las asociaciones de vecinos hicieron ayer su voz, informa Joaquima Utrera. Sants, Sagrera y Sant Andreu unieron sus voces para anunciar que presentarán alegaciones al proyecto del AVE porque no están dispuestos a perder la ocasión que les brinda la alta velocidad para coser los desgarros que sus antepasados ferroviarios causaron en su territorio. Cubrir las vías en Sagrera y sumergirlas en Sants son las alternativas que defienden los vecinos y para ello piden a las administraciones y a Renfe que los apoyen. Están dispuestos a negociar un calendario que prevea soterrar las vías aunque se lleve a cabo después de 2004.

En las palabras de las asociaciones de vecinos prevaleció el tono conciliador, pero no faltaron advertencias como la de Sants: "El AVE entrará en Sants sumergido o no entrará", dijo su portavoz, Josep Charles. También hubo reproches al Ministerio de Fomento por aportar "soluciones imaginativas hasta L'Hospitalet, capaces de sortear ríos y obstáculos diversos" pero luego, dicen que se les agota la creatividad. A la Generalitat le echaron en cara que no haya dado ningún paso para que el metro deje de pasar descubierto por Sants pese a las cartas del presidente Jordi Pujol en las que indica que el asunto estaba en vías de solución.

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