La defensa de Koldo Larrañaga solicita ocho años por el crimen de Begoña Rubio
El abogado defensor de Koldo Larrañaga, acusado del asesinato de la abogada vitoriana Begoña Rubio el 24 de mayo del año pasado, considera el hecho como un homicidio simple por el que demanda para el procesado ocho años de prisión. Ante la autoinculpación del detenido, su letrado no puede inicialmente solicitar su libre absolución, pero incluye la atenuante de trastorno mental en el momento de producirse la agresión.El fiscal y el resto de las partes han acusado a Larrañaga de asesinato, robo con violencia y delito contra la libertad sexual, con penas que van de 30 a 37 años de reclusión, pero la defensa considera que el único indicio de culpabilidad que existe es la propia confesión del detenido. En su escrito de conclusiones afirma que no existe un móvil y ni siquiera se ha demostrado su presencia en el despacho de la abogada en el momento de su muerte, aunque sí en las horas previas al crimen.
El defensor se sirve de la atenuante de trastorno mental, pese al informe psiquiátrico, que ofreció un perfil normal del encausado, e interpreta que en el momento de los hechos podía encontrarse en un estado mental diferente.
Además, rechaza que existiese ensañamiento, aunque el cadáver de la joven presentaba 14 puñaladas, basándose en que la muerte le sobrevino con la primera de ellas, que le afectó a la arteria pulmonar y le seccionó el pericardio. La defensa de Larrañaga agrega que el acusado ha sido sometido a controles médicos por "episodios amnésicos" padecidos en la cárcel de Nanclares de la Oca, donde lleva recluido 16 meses.
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