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Las asociaciones de consumidores critican el acuerdo del transporte

Los transportistas volvieron ayer al trabajo tras el acuerdo alcanzado el miércoles con el Gobierno. Los pasos fronterizos de Irún y La Jonquera amanecieron despejados, y Francia levantó la prohibición de circular a los camiones con destino a España. Ayer fue día de balances. Las asociaciones de consumidores criticaron el incremento de tarifas del 10% pactado con los transportistas y reiteraron la necesidad de que el Gobierno reduzca el impuesto de hidrocarburos. Por su parte, los propietarios de gasolineras amenazaron con un cierre a partir del día 30.

Coste final

La normalidad en las carreteras, las quejas de las seis principales asociaciones de consumidores -Ceaccu, Fuci, Hispacoop, OCU, UCE y Unae- por la fórmula con la que el Gobierno ha solventado la crisis y la amenaza de cierre de la Confederación Española de Propietarios de Estaciones de Servicio fueron los hechos más destacados ayer, el día después de que el Gobierno pusiera sobre la mesa un total de 120.000 millones de pesetas para acabar con las protestas de camioneros, agricultores y pescadores. Los propietarios de gasolineras, que se oponen a que las cooperativas de agricultores distribuyan combustible, adelantaron que si el Gobierno no atiende sus demandas emprenderán un proceso de suspensión de pagos y de regulación de empleo que podría afectar a 3.000 gasolineras independientes y 25.000 trabajadores.

A las organizaciones de consumidores, el acuerdo diseñado por el Gobierno para solucionar la crisis del crudo tampoco les parece acertado. En conferencia de prensa conjunta, el secretario general de UCE, Jorge Hinojosa, destacó que el aumento de tarifas del 10% pactado por las empresas cargadoras con los camioneros "influirá negativamente" en el coste final que pagan los consumidores por los productos transportados.La opinión de los consumidores, que mantienen la reivindicación de que bajen los impuestos de hidrocarburos, coincidió con la expresada por el director general de la patronal del automóvil, Anfac, Luis Valero. Éste señaló en declaraciones a Onda Cero que los acuerdos firmados con los transportistas tendrán efectos inflacionistas.

Las fábricas de automóviles, muy afectadas por los paros, volvieron poco a poco a la normalidad. Según Anfac, y sin cuantificar pérdidas, las factorías han dejado de producir una media de 1.000 vehículos por planta en los tres días de protestas. La patronal del automóvil planteó ayer la necesidad de abrir un nuevo paso fronterizo con Francia.

El progresivo regreso a la normalidad en puertos, lonjas, fábricas y carreteras estuvo cuajado de valoraciones y de advertencias. Así por ejemplo, las asociaciones que agrupan a los transportistas autónomos -y que no han firmado el acuerdo-, Uniatramc, Fedatrans y Fetransa, desconvocaron las protestas que estaban en marcha pero advirtieron que, en los próximos días, sus 40.000 afiliados estudiarán en asamblea los acuerdos firmados con el Gobierno, que dicen benefician sobre todo a las empresas del sector. Según un portavoz del comité de paro, las asociaciones mencionadas plantearán "nuevas estrategias de presión" para conseguir un gasóleo profesional.

Más satisfechos, la Confederación del Taxi y la Unión Nacional de Asociaciones de Autotaxis sellaron también ayer la paz con el Gobierno una vez que éste concretó la cuantía de las bonificaciones destinadas al sector: 3.500 millones. El fleco de los taxistas no fue el único que se cerró ayer. Fomento se comprometió a elaborar un documento de justificación de transporte de carga que facilitará la inspección en el sector del transporte.

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