Yvars muestra en un libro su mirada sobre el arte del siglo XX

Arte de vanguardia

"Se suele dar una categoría menor a los artículos en prensa. Pienso que hay que comenzar a tratarlos con más consideración y perder ciertos complejos", opina el veterano historiador del arte J. F. Yvars, que a través de artículos periodísticos ha ofrecido su particular visión de las vanguardias históricas del arte del siglo XX. Parte de esos artículos han sido reunidos ahora en el libro Al tiempo del arte. Notas de crítica (Albatros), que en su edición catalana lleva por título Al temps de les formes. Notes d'art (Edicions 62).En sus artículos se citan los nombres de Bonnard, Henry Moore, Bacon, Cartier-Bresson, Juli González, Duchamp, del que opina que "su grandeza fue reírse de sí mismo", y los movimientos futurismo o el surrealismo. El libro no pretende ofrecer una reconstrucción del arte del siglo XX, pero aporta reflexiones que en ciertos momentos pueden ampliar el concepto, a veces demasiado constreñido y mitificado, de lo que han representado las vanguardias históricas.

J. F. Yvars, que fue director del Instituto Valenciano de Arte Moderno (IVAM), vive en la actualidad en Londres y muchas de las apreciaciones que expresa en el libro son sugeridas por su visión nómada. En sus reflexiones, el historiador del arte se vuelve más escéptico cuando abandona la tradición vanguardista y se adentra en el arte más actual. "Ahora se ha perdido el aspecto formal del arte", dice. Yvars piensa que la tradición artística del arte moderno en cierta manera no es válida para la creación de hoy en día y observa con cierta inquietud los rumbos que seguirá el arte actual, basado principalmente en la transmisión de ideas más que en la plasmación matérica de la creación artística.

Yvars recuerda que el arte de las vanguardias nació en las trincheras, cuando a la voluntad de transformar la sociedad había que otorgarle una nueva imagen, ya que los tradicionales esquemas burgueses del arte se habían anquilosado. "El arte es una sucesión de agotamiento de formas", dice. Piensa que ahora "no se hace un arte ni mejor ni peor", pero existe un desaforado consumo que hace agotar cualquier expresión. También ironiza sobre la cuestión de la multiculturalidad, una de las ideas recurrentes en el arte moderno. "Los tics de Nueva York se han convertido en universales. Esta es la multicultura actual", dice.Considera Yvars que la recopilación de artículos del volumen, publicados en el diario La Vanguardia en la sección fija 'A través del espejo', han compuesto un libro legible, con reflexiones abiertas, ya que no se considera una persona dogmática. "Con el tiempo he comprobado que el arte es una expresión flexible, que necesita de energía y vehemencia. Considero el arte como un gran juego maravilloso", dice. La versión catalana del volumen incluye un prólogo del arquitecto Oriol Bohigas.