Los reyes de las 'katas'

En los archivos del deporte nacional los nombres de Sira Nieto e Ignacio Serapio tal vez no significan mucho. Pero en el mundo de las artes marciales Sira, de 18 años, e Ignacio, de 23, son sinónimo de oro, pues el pasado mes de julio consiguieron dos títulos en un campeonato mundial que se celebró en EE UU.Sira e Ignacio triunfaron en las modalidades de katas. Allí son verdaderos expertos. En sus palabras, las katas son técnicas de defensa personal que se convierten en estudiados golpes al aire. Se pueden efectuar con armas o montar coreografías y ponerles música. Eso las convierte en un espectáculo "inteligente y divertido". "Es como un combate virtual. Y es, también, el principio y fin de cualquier arte marcial", explica José Antonio Guiral, el representante en España de United States Karate Alliance, la asociación que cada año organiza el campeonato. "Ésta fue la primera organización que se creó en el mundo occidental para agrupar a todas las artes marciales", añade Guiral. Por allí han pasado figuras mediáticas como Chuck Norris, uno de los principales exponentes de estas técnicas en el celuloide. La delegación de United States Karate Alliance en España, con sede en Barcelona, funciona paralela a la federación española de artes marciales.

Para conseguir el dinero para desplazarse hasta Nueva Orleans, sede del torneo, Sira e Ignacio tuvieron que empadronarse en Castilla-La Mancha (ella nació allí y él tiene una casa en esa zona), aunque realmente viven en la avenida de la Albufera, en Puente de Vallecas. Del Ayuntamiento de Illescas recibieron 75.000 pesetas de ayuda y 25.000 del Gobierno castellano-manchego.

Tuvieron que hacerlo así porque en Madrid no encontraban ayuda. "En 1997 yo había solicitado apoyo a la Comunidad y sólo me dieron un escudo", recuerda Ignacio, que ya estuvo una vez en el campeonato. Sus padres tuvieron que sufragar los gastos del viaje. Lo mismo ocurrió con Sira. "Si no hubiera sido por ellos no habríamos podido asistir", señala. "Pero fue una experiencia emocionante", dice Sira, con una enorme sonrisa en la boca.

Sira e Ignacio participaron junto a 12 competidores más en un equipo conformado por 15 deportistas que representaban a España. En total eran cerca de 1.500 concursantes. "Representamos a España, pero no pertenecemos a ninguna federación de aquí porque sentimos que no nos ofrecen nada, además, no tenemos ningún apoyo estatal", dice Ignacio. "En Estados Unidos las artes marciales tienen más seguidores. Cuando ganas un primer puesto la euforia es total, es una experiencia inolvidable. Si aquí vas por la calle con un trofeo la gente te mira mal", cuenta Sira.

El 7 de octubre ambos participarán en una exhibición en la discoteca Joy Eslava. Allí mostrarán lo mejor de su repertorio. "Tenemos la mala suerte de que aquí no hay muchos seguidores para esta modalidad, pero queremos que se conozca más", dicen, casi al unísono, los jóvenes campeones. Los dos esperan poder recibir más apoyo, pues ya sueñan con repetir su hazaña el próximo año.