Una bomba de los GRAPO destruye dos plantas de la sede del diario 'El Mundo' en Barcelona
Los Grupos de Resistencia Antifascista Primero de Octubre (GRAPO) volvieron a actuar ayer en Barcelona con la colocación de un artefacto explosivo que destruyó por completo dos de las tres plantas de la delegación en Cataluña del diario El Mundo. Las cinco personas que se encontraban en el edificio al producirse la deflagración, a las 10.05, pudieron ser evacuadas antes de que estallase el artefacto. Pese a ello, cuatro policías y un transeúnte resultaron heridos de carácter leve al ser alcanzados por los cristales que salieron despedidos como consecuencia de la explosión.
Siniestro total
Los activistas -dos hombres y una mujer- actuaron con la cara cubierta y, pistola en mano, amenazaron a una administrativa que acudía a trabajar al edifico de oficinas, situado en el número 119 de la calle de la Diputaciò, en pleno Eixample barcelonés. Una vez dentro, se identificaron como miembros de los GRAPO, redujeron a la vigilante de seguridad y dejaron la mochila que contenía el artefacto en la papelera de un altillo, situado entre la planta baja y la Redacción.Tras advertir de que la bomba explotaría en 10 minutos, los grapos huyeron en compañía de un cuarto activista que les esperaba fuera, probablemente en un coche. La rápida actuación de la vigilante de seguridad permitió desalojar a las cinco personas que había en el edificio y advertir a los empleados de las oficinas colindantes. La explosión se produjo antes de lo previsto, cuando llegaron los primeros policías.
Fuentes de la investigación explicaron ayer que, a falta del análisis definitivo, es muy probable que se tratara de un artefacto de fabricación casera al que se incorporó un temporizador y compuesto de cloratita y pentrita, una sustancia que actúa como potenciador. La policía considera que se trata de un artefacto de mediana potencia, incapaz de afectar a la estructura de un edifico, pero que dimensiona mucho sus efectos si se coloca en un recinto cerrado y reducido como el de ayer, de cinco por diez metros de superficie.
"Esto impresiona mucho porque uno no está acostumbrado", explicaba ayer Vicente Márquez, mecánico de un taller situado enfrente del diario, que oyó y vio los efectos de la explosión. Como consecuencia de la misma, la planta baja y el altillo que albergaba los departamentos de administración y publicidad del diario quedaron destruidos por completo y han sido declarados siniestro total. La redacción, situada en la planta superior, quedó ligeramente afectada por un incendio, aunque los sistemas informáticos no quedaron inutilizados y los periodistas reanudaron su trabajo por la tarde. El tabique de una portería situada junto al diario también resultó derruido.La policía considera muy probable que los terroristas que actuaron ayer en Barcelona sean los mismos que el pasado sábado atracaron un furgón blindado en el barrio de La Verneda de esta ciudad. En esa acción lograron tres millones y medio de pesetas y las armas de los guardias de seguridad que, casi con toda seguridad, fueron utilizadas ayer.
Los investigadores creen también que dos de esos cuatro grapos son Israel Torralba Blanco y Esther González Ilaraz, a quienes se atribuye su participación, el 8 de mayo en Vigo, en el asalto a un furgón blindado que se saldó con la muerte de dos vigilantes y un terrorista herido, aunque no lograron el botín. La última vez que los GRAPO actuaron en Barcelona fue el 8 de junio, cuando colocaron cuatro artefactos contra empresas de trabajo temporal (ETT). La explosión de ayer se produce 48 horas después de que estallaran tres artefactos en ETT de Valencia, Madrid, Sevilla y Vigo. Otro artefacto compuesto por una bombona de gas de campaña y recargas de mecheros hizo explosión ayer en una ETT de Vitoria, provocando importantes daños materiales.
Los investigadores creen que el recrudecimiento de la actividad de los GRAPO está relacionado con la proximidad del 1 de octubre, cuando se cumplirán 25 años de su nacimiento. El ministro portavoz del Gobierno, Pío Cabanillas, avaló ayer esta hipótesis. Sin embargo, las mismas fuentes policiales consideran que al margen de los móviles políticos, los GRAPO atraviesan por un momento de penuria económica que les obliga a realizar acciones propias de delincuencia común.
El atentado de ayer fue condenado de forma unánime por todos los partidos políticos e instituciones de Cataluña y el resto de España, así como numerosos colectivos profesionales, como el comité de redacción de EL PAÍS, y sindicatos. Representantes de diversas ideologías, principalmente del PP de Cataluña, acudieron ayer al lugar de los hechos para condenar la acción y solidarizarse con los periodistas.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.