Sanidad remite a mayo de 2001 para solucionar los errores detectados en la nueva tarjeta sanitaria

La Consejería de Sanidad se encuentra desbordada ante los numerosos errores que está registrando la tarjeta sanitaria. El centro de salud de la calle de Salvador Pau de Valencia remite al mes de mayo de 2001 a los pacientes que solicitan cita para resolver los problemas que están detectando en este nuevo documento destinado a sustituir la cartilla de la Seguridad Social. Otros centros, según fuentes sanitarias, dan cita para febrero.Los errores afectan fundamentalmente a la información personal de los pacientes. La tarjeta se ha elaborado a partir de los datos del padrón de 1996 y de la información con que contaba el Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS). La combinación de ambos en un archivo informático y los cambios de domicilio están desembocando en errores en el documento sanitario que han de subsanar los pacientes acudiendo a los centros de salud.

Los responsables de la atención primaria valenciana están destinando personal administrativo encargado de otras funciones a solucionar los errores. Este personal es el encargado también de activar las tarjetas que no presentan problemas, lo que provoca que se dediquen de forma exclusiva al documento.

Esta situación está provocando una " sobrecarga de trabajo" en el resto de actividades, como denuncia la diputada socialista María José Mendoza, ya que los centros están sufriendo esta situación "sin que se les haya dotado de recursos adicionales". La representante del PSPV denunció ayer que el proceso de entrada en funcionamiento de la tarjeta se haya centrado en la atención primaria dejando de lado la especializada donde no hay terminales ni lectores de la tarjeta. Mendoza denuncia también la falta de planificación en la aplicación de la medida ya que en las direcciones territoriales hay unidades de validación y acreditación "que no están interviniendo en el proceso" y aligerarían la aplicación del documento.

La implantación de la tarjeta ha provocado repetidos quebraderos de cabeza a Sanidad. Una remesa de 50.000 fue sustituida el año pasado al detectarse problemas. Otros miles cambiaron la condición de pensionista de otros tantos pacientes, un error que se descubrió el pasado mayo.