La tasa de paro alcanzó en agosto su nivel más bajo desde final de 1979
El número de desempleados registrados en el Instituto Nacional de Empleo (Inem) bajó en 1.179 personas el mes pasado. El dato es positivo si se compara con el del mismo mes de 1999, cuando el desempleo aumentó en 3.501 personas, pero queda lejos de la caída media de 12.997 que reflejan los últimos 15 años en el mes de agosto. La tasa de paro se sitúa ya en el 8,86% de la población activa, el nivel más bajo desde diciembre de 1979.
Medidas drásticas
El Inem contabilizó 1.487.606 personas sin empleo el mes pasado, la menor cifra de paro registrado desde enero de 1981 en términos absolutos. El descenso con respecto al mes anterior fue del 0,08%, "una magnitud muy pequeña", según reconoció el secretario general de Empleo, Juan Chozas, aunque suponga el séptimo mes de descenso consecutivo. Agosto ha tenido tradicionalmente un buen comportamiento en cuanto a disminución del desempleo, pero desde 1996 inició una tendencia decreciente, que alcanzó su peor dato el año pasado, con un aumento de 3.501 parados sobre el mes anterior.Chozas ofreció ayer dos lecturas diferentes de esas cifras. Una pesimista, que radica en la excesiva temporalidad del mercado de trabajo, que afecta a más de un tercio de los contratos. Otra optimista: el número de contratos indefinidos, que, con los 74.058 nuevos firmados en agosto, eleva la tasa de contratación indefinida al 7,31%. Este porcentaje es el mayor logrado nunca en agosto y el doble de lo registrado antes de la reforma laboral de 1997. El número total de contratos creció un 8,94% con respecto al mes de agosto de 1999.
Para Jesús Pérez, secretario ejecutivo confederal de UGT, estos datos suponen una paradoja: "Si la ley fija unas causas concretas para la contratación temporal y ésta se utiliza para otras cosas, estamos ante un fraude". Chozas tiene una explicación para la excesiva temporalidad: "Es difícil cambiar la mentalidad de las empresas y unos comportamientos muy arraigados en el mercado laboral". La reducción del paro en el mes de agosto ha evidenciado la práctica empresarial de suprimir contratos con la llegada del periodo vacacional para reanudarlos en septiembre. Prueba de ello es que el paro ha aumentado en los sectores de construcción (5,74%) e industria (3,34%). La ley impide estas prácticas, ya que el contrato temporal está sujeto a una función concreta y no sirve para trabajos de carácter indefinido.
Los sindicatos proponen "medidas drásticas" para reducir la excesiva temporalidad. Lola Liceras, secretaria de empleo de Comisiones Obreras, sugiere que el Gobierno sea más beligerante en el cumplimiento de la normativa. Para ello, las dos principales centrales, UGT y CC OO, han propuesto al Ejecutivo que se realicen inspecciones periódicas de los contratos que realizan las empresas para descubrir si son fraudulentos o no. Una estrategia similar a la que realiza el Ministerio de Trabajo con los fraudes en las cotizaciones a la Seguridad Social. "El Gobierno tiene obligaciones en materia de contratación y realmente no las cumple. Haría falta un mayor control", asegura Liceras. Para UGT, además de esa medida, se podría gravar económicamente la contratación temporal por encima de la indefinida, de forma que disuadiera a los empresarios de acogerse a esta fórmula.Chozas instó ayer a la mesa del diálogo social -en la que participan empresarios y sindicatos- a que busque medidas para solucionar este problema, aunque los sindicatos insisten en que su responsabilidad no es exclusiva. No sólo las estrategias de control contribuirán a potenciar el empleo. Tanto CC OO como UGT propusieron ayer dotar al Inem de mayor presupuesto para acometer políticas activas de empleo. "Hasta ahora, el desempleo ha bajado ligado a la coyuntura económica de crecimiento, pero cuando ésta se empiece a ralentizar, como ya está ocurriendo, ¿qué va a pasar?", se pregunta Jesús Pérez, de UGT. La propia CEOE, la principal organización empresarial, advirtió ayer de que se está desacelerando la creación de empleo y pidió medidas que modifiquen esta tendencia.
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