_
_
_
_

El Canal de Isabel II construye ya su parque contra la especulación

La Comunidad invertirá 350 millones

El Canal de Isabel II ha iniciado este verano la construcción de un parque de 15.000 metros cuadrados en su solar de la plaza de Castilla. La zona verde, situada en un lugar donde la Comunidad proyectó una recalificación para obtener plusvalías millonarias y Ferrovial intentó adelantarse para conseguir aún más beneficios, estará terminada en octubre si se cumplen los plazos. Al mismo tiempo, el Canal rehabilitará la antigua central elevadora de la plaza de Castilla, un edificio abandonado que servirá para exposiciones y conferencias.

La Comunidad de Madrid decidió hacer el parque cuando supo que Ferrovial había comprado a antiguos propietarios sus derechos para intentar obtener fuertes plusvalías. El Gobierno regional suspendió entonces una operación urbanística que tenía previsto hacer en esa zona y aprobó la creación de ese parque contra la especulación. Costará 350 millones de pesetas.El recinto, que estará rodeado por una valla metálica, permanecerá cerrado durante la madrugada y tendrá tres accesos: uno en la esquina de la plaza de Castilla -frente al depósito-, otro en la calle del General López Pozas y otro en el paseo de la Castellana. Su construcción incluye la sustitución de gran parte del actual cerramiento de ladrillo por una verja.

El jardín tendrá un estanque debajo del depósito, zonas de césped, fuentes con surtidor, un paseo arbolado, área de juegos infantiles, zonas de reposo, recreo y un área deportiva.

Miguel García Poveda, director gerente de la Fundación del Canal, se muestra muy orgulloso de esta obra: "Además de mantener el uso público de las instalaciones, se incorpora un gran jardín a las calles adyacentes".

El Canal tiene previsto rehabilitar la antigua central elevadora, situada junto al depósito, en la confluencia del paseo de la Castellana y Mateo Inurria. El edificio servirá de sede de la Fundación del Canal de Isabel II, organismo sin ánimo de lucro que se acaba de crear. El edificio de dos plantas de la antigua central elevadora contará con una superficie de 2.400 metros cuadrados. Parte de su piedra caliza se ha desprendido y los vidrios de las ventanas están en su mayoría rotos.

El proyecto de reforma incluye un salón de actos para 200 plazas, una sala de exposiciones de 270 metros cuadrados, una sala de lectura y cuatro aulas para 20 alumnos dotadas de tabiques móviles.

Los arquitectos quieren mantener el carácter original del inmueble, propio de las edificaciones del Canal de Isabel II de los años cuarenta y cincuenta, con ladrillo visto, granito gris y piedra de Colmenar. En la zona interior se pretende conseguir un espacio amplio y luminoso abierto a las zonas ajardinadas colindantes.

El Canal pretende inaugurar el nuevo centro en 2001, coincidiendo con el 150º aniversario del comienzo de las obras de la traída de aguas a Madrid.

Con la construcción del parque y la reforma de la central elevadora, el Gobierno regional entierra los derechos de reversión de 30 familias que fueron expropiadas en los años veinte para levantar las instalaciones del Canal. El Gobierno del PP anunció que iba a construir un complejo judicial en la misma parcela y lo iba a pagar con la recalificación de una esquina del solar para hacer un rascacielos de oficinas. Los reversionistas se unieron y reclamaron una indemnización, ya que los fines por los que fueron expropiados habían cambiado. La Comunidad ofreció 2.500 millones. Pero se interpuso Ferrovial, que ofreció más y frustró la operación. Los reversionistas, gracias a Ferrovial, perdieron 2.500 millones.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_