Cerca de 40.000 aficionados confirman un récord de abonos

El registro de las oficinas del Atlético, en el estadio Vicente Calderón, reflejó ayer el grado de solidaridad de la afición rojiblanca. En uno de los peores momentos de la historia del club se batió un récord, confirmado por la asistencia en masa a ver el partido de presentación. Desde que Jesús Gil es el propietario nunca se habían vendido tantos abonos. Más de 37.000 hinchas se han inscrito hasta el momento para alentar al equipo en su paso por Segunda División. 10.000 seguidores más que en el verano de 1997, cuando los fichajes de Vieri y Juninho levantaron grandes esperanzas de ganar otra vez la Liga. Entonces se vendieron 27.600 abonos. El número más alto de abonados, sin embargo, se remonta al año 1973, cuando se superaron los 40.000. Una cifra que puede alcanzarse de un momento a otro. Ayer los jugadores lo agradecieron paseando una pancarta por el campo: "40.000 abonados, 40.000 gracias".El efecto de la publicidad es uno de los detonantes de la venta de abonos, la más alta de España después del Madrid y el Barcelona. La campaña, coordinada por el director de imagen del club, Emilio Gutiérrez, exhibe un cartel de Kiko rematando de bolea en medio de las llamas. "El fuego y el infierno sugieren un mensaje purificador", dice Gutiérrez. Otro incentivo capital es el precio: hoy cuesta 14.000 pesetas el abono más barato y 42.000 el más caro. El año pasado los precios oscilaban entre 28.000 y 120.000 pesetas. Entonces sólo se apuntaron 24.000 hinchas.