Cascos anula los cambios de Aberchan y del GIL al plan urbanístico de Melilla

El ministro de Fomento, Francisco Álvarez Cascos, ha anulado la modificación del plan de urbanismo de Melilla efectuada durante la etapa en la que gobernó Mustafa Aberchan, de Coalición por Melilla (CpM), con el apoyo del Grupo Independiente Liberal (GIL), promovido por el alcalde de Marbella (Málaga), Jesús Gil. Aberchan se vio desalojado de su cargo presidencial por una moción de censura el 18 de julio. Una semana después fue sustituido por Juan José Imbroda, que cuenta no sólo con el respaldo de su grupo, la Unión del Pueblo Melillense (UPM), sino también con la del PP, el PSOE y los tránsfugas del GIL.La orden de nulidad, aparecida ayer en el BOE, está amparada por una reforma introducida en la Ley de Acompañamiento a los Presupuestos por la que el Gobierno central asume la facultad de revisar los planes urbanísticos de las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla. Esa decisión tuvo como telón de fondo impedir que el GIL tuviera las manos libres.

Gil tiene varios procesos abiertos por presuntos delitos urbanísticos. Además, la Audiencia de Málaga está pendiente de dictar sentencia por la presunta desviación de 450 millones de pesetas del Ayuntamiento marbellí para financiar con publicidad en sus camisetas al Atlético de Madrid, club de fútbol que también preside Gil. A su vez, la Audiencia Nacional también debe resolver el denominado caso Atlético: supuesta apropiación indebida de bienes del club, estafa y delitos contables.

En la orden de suspensión de las modificaciones al plan de Melilla, Fomento dice que deben subsanarse varias deficiencias. Entre ellas, hay que "determinar expresamente qué suelos quedan incluidos en la categoría de suelos urbanos consolidados y cuáles no, eliminando la referencia a su determinación discrecional por parte del aplicador del derecho". Asimismo, se advierte de que la edificabilidad asignada a cada barrio debe indicarse por número de plantas y "rebajarla en los casos que sobrepasen la norma de alturas, ocupación y regulación de áticos". También se exige que en varios barrios se regulen los edificios que pueden construirse sin aparcamientos y "no de forma generalizada".

Según Enma Marín, portavoz de Fomento, las deficiencias del plan a corregir se limitan a errores en la exposición de datos y medidas, "no uniformes", ya que en unos artículos alude a los metros de altura y en otros al número de plantas. El nuevo consejero de Obras Públicas melillense, Ernesto Rodríguez, del PP, ha sido convocado por Fomento para finales de mes para negociar los cambios.

Mientras tanto, el presidente de Ceuta, Antonio Sampietro, del GIL, acusó ayer a su homólogo de Melilla de "sumisión ante el Gobierno central" por no recurrir el rechazo del Tribunal Constitucional a que ambas ciudades se consideren autonomías. Esta figura les dotaría de competencias urbanísticas plenas, así como de la facultad para recurrir leyes del Gobierno central ante el alto tribunal.