"No engañas a nadie si sólo tienes imagen y tu música no vale"

El cuarteto vigués Killer Barbies, auténtico icono viviente del punk rock de imaginería gore de los años 90, con tres discos en España, ha terminado llamando la atención de los especialistas en rock de última generación del continente europeo. Killer Barbies lleva vendidos en Alemania 45.000 discos de su último trabajo, Bad Taste, realizado y producido en ese país para el sello teutón Drakkar. La atractiva y llamativa Silvia Superstar y Billy King, batería del grupo y coautor de los temas explican este último disco como una especie de recopilación de sus tres discos anteriores. "En Alemania como nadie nos conocía lo que han hecho ha sido darnos carta libre para que nosotros seleccionásemos las canciones que queríamos y han querido volver a grabarlas con producción alemana", afirma Billy King.

Killer Barbies, que hace unos años protagonizaron una película de terror a la que pusieron su nombre y que fue dirigida por el legendario especialista del género Jesús Franco, ven ahora como su imagen inunda las portadas de las revistas musicales germanas, que les dedican encendidos calificativos, recordando además que pertenecen al mismo país que Dover o Los Héroes del Silencio, dos antecesores españoles que dejaron su huella en las preferencias del público de ese país.

Su impacto ha sido tal que el vídeo de su primer sencillo, They come from Mars, se ha mantenido durante semanas en los primeros puestos de la cadena de vídeos musicales Viva, la más influyente de centroeuropa. Un éxito que les llega depués de una carrera que, en España, no llegó nunca a salir de circuitos muy limitados.

Pese al silencio discográfico mantenido en nuestro país, el grupo ha seguido en activo todos estos años merced al directo: "Hemos estado básicamente girando y no hemos dejado de hacer cosas, componiendo canciones nuevas. Tenemos preparado un disco nuevo completamente kafkiano, pero lo hemos dejado un poquito de lado por que nos hemos centrado del todo en esta experiencia alemana", explica la cantante.

Supervivientes de una década que apenas ha dejado nombre representativo en pie -Dover, Manta Ray o Doctor Explossion-, afirman que el hecho de que el mercado musical alemán, sin duda uno de los más fuertes del continente, se haya fijado en ellos ha supuesto "una inyección de ilusión y de ganas, de volver a retomarlo otra vez con más fuerza".

Aunque su personal y llamativa imagen les ha abierto más de una puerta, para ellos no ha sido todo cuestión de aspecto: "Ha sido una mezcla de todo, porque si sólo tienes imagen y tu música no vale nada, la gente no es tonta y no se deja engañar. Aunque, claro, siempre nos hemos preocupado mucho de nuestro aspecto, porque todas las bandas que nos gustan -Ramones, Misfits o Kiss- tienen una imagen muy marcada".

Este culto a la imaginería negra y sangrienta supone una especie de congelación del travieso espíritu de los rockeros adolescentes: "Son cosas que nunca se pierden, que todo el mundo debería guardar un poco al crecer. Este espíritu näif es super importante para nosotros", afirma Silvia Superstar.

No obstante, su apuesta por el inglés como idioma y vehículo para expresarse, el grupo no descarta intentarlo también en el idioma patrio, como explica Billy King: "Tenemos hecho un disco entero en castellano que está ahí quemándonos las manos pero hasta después de Navidades no creo que lo podamos sacar, ahora estamos muy centrados en todo esto", comenta.

" Silvia al principio no estaba muy convencida y pensaba que sólo debíamos hacer dos canciones en castellano, porque todo iba a ser muy brusco, pero al final grabamos doce".

Killer Barbies tienen ya programada una gira acompañando al histórico Iggy Pop, que los llevará por varias ciudades alemans entre el 2 y el 7 de septiembre, así como colaboraciones con afamadas bandas germanas: "Hay un proyecto del cantante de un famoso grupo alemán, Die Toten Hösen, para grabar una canción a medias para una película. Una canción popular alemana, aunque no sé si mi parte la haré en alemán o en castellano".

Los miembros de Killer Barbies no piensan desaprovechar esta racha y están dispuestos a abrirse a públicos aun más lejanos. Acaban de volver de Japón, donde participaron con éxito en un festival de rock, junto a grupos internacionales como Placebo y Foo Fighters. A veces la persistencia es tan importante como el talento.