"La violencia y la extorsión no crean riqueza"

"A pesar de los continuos ataques que, a lo largo de los últimos años el colectivo al que representamos lleva sufriendo, los empresarios guipuzcoanos hemos continuado al frente de nuestras empresas, invirtiendo aquí, generando nuevos proyectos que garanticen el futuro, y todo ello, en muchas ocasiones, en la soledad e incomprensión de muchos".José María Korta, hasta ayer presidente de Adegi, la patronal guipuzcoana, manifestaba así en su último acto publico, el pasado 13 de julio, ante el diputado general de Guipúzcoa, Román Sodupe, el compromiso de los empresarios con la inversión. En este encuentro con 40 miembros de Adegi, Sodupe pidió a la patronal que tuviera capacidad suficiente para resistirse a la extorsión por parte de ETA.

El compromiso de los empresarios con Guipúzcoa, según el criterio de Korta, recibía el apoyo cada vez mayor de la sociedad, que ha sabido "valorar", dijo en esa ocasión, su labor y "rechazar" los ataques a los que se les somete. "El tejido empresarial guipuzcoano, compuesto en su inmensa mayoría por pequeñas y medianas empresas, se ha sentido siempre como parte de la sociedad guipuzcoana, a la que ha intentado aportar su esfuerzo para la generación de riqueza y empleo", afirmó Korta en su afán por reiterar el compromiso de las empresas guipuzcoanas con el intenso desarrollo de este territorio.

"Nadie sensato en esta sociedad puede admitir que la violencia y la extorsión puedan ser una vía adecuada para incrementar las inversiones, crear riqueza y alcanzar el pleno empleo o conseguir, como sociedad, algo relevante", aseguró aquel día la última víctima de ETA.

La intervenciones públicas de las patronales vascas han estado marcadas en los últimos años por la dualidad de la buena marcha económica y la convivencia con la violencia terrorista. Korta, como cabeza visible de los empresarios guipuzcoanos, propuso en este último acto público el diálogo como solución y pidió el rechazo "del lenguaje descalificador, de confrontación y polémica permanente, que generan frustración y que en nada ayudan a generar la esperanza que necesita la sociedad vasca".

Tan sólo un mes antes, en la asamblea anual de Adegi, en la que fue reelegido presidente, Korta también pedía a las instituciones políticas que actuaran con "sensatez, lealtad y altura de miras para lograr la cohesión de la sociedad".

Korta aseguró entonces: "La continuidad de la violencia, la ruptura de la tregua y la inestabilidad política están impidiendo dedicar las energías necesarias para que las empresas sean más competitivas".