García Lorca triunfa sobre los elementos
Por primera vez en sus 20 años de historia, el Festival Internacional de Músicas de Torroella de Montgrí (Girona) había decidido incluir el flamenco en su programación y en esta primera vez decidió jugar a caballo ganador: Carmen Linares interpretando a Federico García Lorca. Pero los elementos, esos monstruos a los que tanto teme cualquier organizador de actos al aire libre, casi consiguieron que tan acertada decisión no llegara a buen puerto en la noche del pasado sábado.Primero fue la lluvia que en forma tormenta amenazó durante todo el día la Costa Brava. Después apareció el terrible viento de tramontana capaz de deprimir a cualquiera y, para acabar con el cúmulo de fenómenos amenazantes a las 21.30, una hora antes del inicio del concierto, un apagón general de luz dejó a Torroella de Montgrí totalmente a oscuras. Pero nada de todo ello pudo con la moral de organizadores, artistas y público, que esperaron pacientemente a que, primero, desaparecieran las nubes, después amainara la tramontana y, finalmente, volviera a hacerse la luz. Con 45 minutos de retraso, a las 23.15, la plaza de la Vila se encontraba abarrotada de público y el concierto pudo comenzar. Como premio a la paciencia las nubes dejaron paso a un cielo estrellado y el termómetro subió hasta alcanzar una temperatura agradable para disfrutar de una soberbia velada.
El viento, el agua y el apagón de luz no pudieron con el perfecto tándem Federico García Lorca y Carmen Linares en su debú en el festival de Torroella de Montgrí. Un debú enmarcado en la propuesta del festival de su Mercado del Mundo, que durante el sábado y el domingo ha propuesto un encuentro intercultural bajo el lema "Todos somos emigrantes, todos somos mestizos". Aunque el viento de tramontana se llevó algunos de los toldos de los tenderetes instalados y el apagón obligó a cerrar una parte del colorista mercadillo, la moral no decayó y las velas sustituyeron a las bombillas añadiendo a la noche un aire más íntimo.
Carmen Linares presentó en Torroella su programa dedicado a las canciones populares que recopiló y armonizó García Lorca y que ahora ella ha reorquestado para un pequeño grupo de guitarras, contrabajo, violín, flauta y percusión.
Sonoridades bellas de artistas dulces envolvieron la profunda voz de la cantaora, mientras se paseaba seductora por ese manojo de temas entrañables. El rajo jondo de Linares, más contenida que en otras ocasiones, y la magia de Lorca llenaron de calor la noche, entusiasmando al numeroso público que acabó puesto en pie.
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