El consejo de Altadis nombrará hoy a Pablo Isla como presidente
El Consejo de Administración de Altadis (la sociedad resultante de la fusión de la antigua Tabacalera y la francesa Seita) se reúne hoy para designar como nuevo presidente de la compañía tabaquera a Pablo Isla Álvarez de Tejera, en sustitución de César Alierta tras la marcha de éste a la presidencia de Telefónica. Alierta podría seguir vinculado a Altadis como miembro del consejo de administración. Isla, actual secretario general del Banco Popular, de 36 años de edad y abogado del Estado, fue director general de Patrimonio desde 1996 a 1998, coincidiendo con la época en la que dependían de este organismo la antigua Tabacalera y Telefónica. Como número tres del Banco Popular, Isla ha impulsado la apuesta de la entidad por los negocios relacionados con la nueva economía y con Internet. Su etapa en la entidad que copresiden los hermanos Valls Taberner se inició en diciembre de 1998.
En su nueva responsabilidad, Isla compartirá la presidencia de Altadis con Jean François Comolli, y ambos deben culminar el proceso de reestructuración de la compañía, fomentar su internacionalización y aumentar el valor de la acción.
Altadis obtuvo en el primer trimestre de este año un beneficio neto de 12.162 millones de pesetas (73,1 millones de euros), y las ventas de la compañía alcanzaron los 107.834 millones de pesetas (648,1 millones de euros), lo que representa un incremento del 17% sobre el mismo periodo de 1999.
Subida de precios
La compañía tabaquera subió a partir de ayer 15 pesetas el precio de las cajetillas de Fortuna, Nobel, Fine y Gauloises, y 10 pesetas el de Diana y Brooklyn. La empresa ha decidido mantener, no obstante, el precio de sus marcas de tabaco negro, como Ducados, BN y Habanos, por razones de estrategia comercial.Así, Fortuna cuesta ahora 295 pesetas; Nobel, 295 pesetas; Nobel Ultra lights, 305; Fine, 410 y Gauloises, 310 pesetas. Por su parte, Diana pasa a costar 270 pesetas, mientras que el precio de Brooklyn será de 250 pesetas.
Este aumento responde a la estrategia de la compañía de ir realizando, paulatinamente y de forma progesiva, incrementos escalonados de precios hasta alcanzar en los próximos años la convergencia con el precio medio del tabaco en la Unión Europea.
Actualmente y a pesar de esta subida, España sigue siendo, junto con Portugal, el país de la Unión Europea que registra los precios más bajos en cigarrillos. El precio medio de tabaco en la Unión Europea se sitúa en 543 pesetas si se toma como referencia la marca más vendida en cada país, mientras que en España la marca más vendida del mercado, Fortuna, con la subida, pasa a costar 295 pesetas.
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