Vecinos de Xàbia proponen una "objeción fiscal" ante la crisis en los servicios
La situación de los servicios municipales es en Xàbia insostenible. Así lo consideran los vecinos de la Asociación del II Montañar, que han lanzado la propuesta de que los habitantes de la localidad se declaren en "objeción fiscal" en protesta por los problemas en el suministro de agua, la falta de aparcamientos y zonas verdes, y la acumulación de basura en las calles y contenedores.
El colectivo del II Montañar también exige que se redacte un nuevo Plan General que evite, en expresión de su presidenta, Ana María Muñoz, que "Xàbia se convierta en un valle de cemento". Los vecinos de Xàbia no están dispuestos a permanecer impasibles ante la grave crisis en los servicios municipales que padece la localidad y que, pese a las promesas del actual equipo de Gobierno, que forman PP, PSPV, Bloc y CDS, ha vuelto a agravarse en esta campaña turística. Los presidentes de todas las asociaciones vecinales, a iniciativa del colectivo del II Montañar, constituirán en los próximos días una comisión que se pondrá en contacto con una asesoría jurídica para pedir responsabilidades al Consistorio.Las primeras medidas de protesta consistirán en convocar en agosto una manifestación y en dejar de pagar los impuestos municipales. La "objeccion fiscal" obedece, según la presidenta de la asociación, a que los ciudadanos de Xàbia no pueden "estar de acuerdo en contribuir a un Ayuntamiento que no presta los servicios básicos". "En mi opinión, hay que pedir la dimisión en pleno de la Corporación por su nula gestión, pero la protesta debe estar también dirigida a la Diputación y a la Generalitat, que, en el tema del agua, ha hecho oídos sordos y ha despreciado los problemas que tiene Xàbia".
El colectivo del II Montañar celebró este sábado una asamblea en la que también participaron representantes de otras entidades, como la del I Montañar o la Plataforma para la defensa del territorio y el litoral de Xàbia. Muñoz aseguró que había mantenido conversaciones con los presidentes de otras asociaciones y que coincidían en que hay que organizar movilizaciones y decretar esa "objeción fiscal".
Durante esa asamblea, la presidente del II Montañar hizo especial hincapié en los problemas en el suministro de agua. Muñoz explicó que, pese a que desde octubre de 1998 los responsables municipales saben que las reservas son insuficientes, "este mes de julio hemos vuelto a quedarnos sin agua potable". "Además, el bando se dictó una semana después de que el Ayuntamiento tuviese conocimiento de que el suministro, por su elevada concentración de nitratos y cloruros, no era apto para el consumo. Por esa negligencia, deberíamos reclamar responsabilidades", denunció.
La quiebra en los servicios básicos exige, según los vecinos, una respuesta contundente "El pasado año pedimos que, mientras Xàbia no tuviera las infraestructuras necesarias, se paralizara la concesión de licencias de obra", recordó Muñoz. "Nos tememos", continuó, "que este municipio se convierta en un valle de cemento y por ello pedimos que se redacte un nuevo Plan General de Ordenación Urbana que preserve los valores naturales y paisajísticos y tenga en cuenta la creación de nuevos viales, aparcamientos, zonas verdes, paseos y áreas de recreo".
