"Quiero que los empresarios tengan más presencia en la Casa de América".

La diplomática María Asunción Ansorena Conto dirige desde el pasado día 20 Casa de América, tras ser nombrada por su consejo rector (formado por el Ministerio de Asuntos Exteriores, el Gobierno regional y el Ayuntamiento de Madrid) para sustituir a Tomás Rodríguez-Pantoja. Esta madrileña de 48 años se ha hecho cargo de este centro, inaugurado en 1992 con motivo de la II Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno. En los tres años que durará su mandato, quiere conseguir que la presencia de América del Norte aumente en los actos de la Casa y que los empresarios de España y Latinoamérica usen más las instalaciones de este centro intelectual de la plaza de Cibeles.Ansorena ingresó en la carrera diplomática en junio de 1979. Fue embajadora de España en Paraguay entre 1993 y 1996. También ha ejercido como subdirectora general para México, Centroamérica y Países del Caribe, en el Ministerio de Asuntos Exteriores. "Haber trabajado en estos puestos te hace más sensible y especializado en estos temas", señaló la nueva directora de Casa de América.

La esposa del ministro

Ansorena tiene previsto nombrar a principios de agosto a los dos subdirectores en que se divide la Casa. Tribuna Americana (la parte que gestiona los actos sociales, políticos y económicos) será dirigida por Juan María Alcina, que también ha trabajado hasta ahora en la Oficina de Información Diplomática (OID), como Ansorena. La otra parte, Ateneo, que se dedica a las artes en general, la llevará Ana López Alonso, esposa del ministro portavoz del Gobierno, Pío Cabanillas. López ha trabajado hasta ahora como directora de comunicación de EL PAÍS-Aguilar. Está previsto que el director de Programación, Íñigo Ramírez de Haro, permanezca en su cargo, según informaron fuentes de Casa de América.Las premisas que Ansorena les dará a los miembros de su equipo serán tres. Se deberá potenciar la presencia del área empresarial en el centro, propiciar como hasta ahora las relaciones entre la Unión Europea e Iberoamérica y apoyar la presencia de España y Portugal en estas relaciones institucionales y empresariales. "Vamos a lanzar un mensaje muy claro al empresariado. Casa de América dispone de unas instalaciones, en las que se pueden llevar a cabo foros de debate y una relación más fluida con los países iberoamericanos. Debemos ser capaces de trasladarles que contamos con una importante oferta para que nos visiten a menudo", explica la recién nombrada directora.

Para aumentar la repercusión de Casa de América en la vida cultural madrileña, Ansorena apuesta por especializarse en algunas disciplinas, como la fotografía. En principio, rechaza que el centro tenga un carácter elitista o desconocido para la mayoría de los madrileños. Asegura que el año pasado ha habido una media de dos actos culturales durante todos los días, salvo en vacaciones. Sin embargo, esa alta actividad no le impide ponerse el listón más alto y marcarse el reto de superar la cifra de 27.000 asistentes a las exposiciones del centro; los 10.600 que vieron alguna película en la Casa o las 17.000 personas que acudieron al punto de información durante el año pasado.

Atraer al público

"Buscamos actos que tengan mayor calado. De este modo conseguimos atraer a un público muy especializado y al gran público en general", comenta. "También apostamos por reforzar el aspecto literario y de pensamiento. Pensamos en acentuar la presencia de grandes escritores de Iberoamérica, España y Portugal, sin despreciar a los otros". La nueva directora también quiere que Norteamérica tenga más protagonismo en el centro. Según Ansorena, Estados Unidos y Canadá también "son muy importantes" en la visión que se tenga del resto de países americanos.La Casa de América acogió el año pasado 763 actos. Esto supuso una gran actividad para los 40 trabajadores de la Casa. Sin embargo, ahora se quieren aumentar: "Creo que la programación es muy amplia y plural para que todo el gran público se sienta atraído por nuestras actividades. En el buzoneo tenemos miles de personas. No vamos descaminados, pero tenemos que ser capaces de llegar a todos los madrileños y al resto de españoles que estén interesados en los temas iberoamericanos".

La nueva directora también ha pedido a la Comunidad y al Ayuntamiento de Madrid mayor presencia en todos los actos que se desarrollen en el centro: "Las relaciones son muy buenas. La Casa de América es un centro muy simbólico y el público debe ver a los responsables madrileños en sus actos".

Las actividades infantiles también recibirán un trato mimado, según Ansorena. Se quiere dar mayor relieve a la llamada Aula Iberoamericana. Se trata de un encuentro entre niños y adolescentes con mediadores. Aquí reciben formación sobre temas culturales, políticos y sociales iberoamericanos. "Se crean muchos programas ex profeso para interesar a estos jóvenes en estos temas", añade Ansorena. "Se trata de concienciar a montones de chicos de lo importante que son las relaciones con Iberoamérica".