Alierta garantiza que el reparto de opciones a los empleados de Telefónica empezará en breve

El nuevo presidente de Telefónica, César Alierta, no quiere tropezar en la misma piedra que su antecesor, Juan Villalonga. En su primer encuentro con los sindicatos aseguró que la semana próxima se iniciará el reparto de opciones sobre acciones para 93.000 trabajadores en el mundo. El presidente de la operadora, acompañado por Villalonga, se reunió también con los altos directivos para preparar una transición ordenada y volver a la normalidad del día a día. Alierta se despidió de la cúpula de Altadis, cuyo consejo elegirá a Pablo Isla como sustituto en la presidencia el próximo lunes.

Alierta, que fue miembro de la comisión de Retribuciones y Nombramientos de la operadora, conoce bien los problemas que han causado las opciones sobre acciones (stock options) en la primera empresa española. Fue el primer plan para 100 directivos del grupo el causante de la ruptura de las relaciones entre su predecesor y el Gobierno y, a la postre, el detonante de la dimisión de Juan Villalonga.El nuevo presidente de Telefónica se ha querido curar en salud. Ayer mismo, Alierta se reunió con los representantes de UGT y CCOO en la empresa para asegurarles, entre otras cosas, que el plan de opciones para los 93.000 trabajadores fijos del grupo en todo el mundo se podrá en marcha en los próximos días. Villalonga prometió en febrero pasado que los planes de opciones se extenderían a toda la plantilla para acallar el escándalo y las críticas del Gobierno, pero ha terminado su mandato sin cumplir la promesa.

Alierta, que estuvo acompañado por Villalonga, aseguró a los sindicatos que el Plan Toledo, como se conoce dentro de la empresa, ha sido entregado ya a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) y que la oferta de opciones a los empleados se iniciará en los próximos días. Además, ratificó a los sindicatos los compromisos sobre estabilidad de plantilla suscritos por su antecesor y se comprometió a mantener una línea de diálogo y reuniones periódicas.

Los trabajadores de Telefónica, según fuentes de la compañía, recibirán una carta en la que se les determinará el número de opciones que pueden adquirir, en función de su responsabilidad, a un precio de cinco euros. El plan tiene vigencia de cuatro años y si el valor de la acción en Bolsa se triplica, la plusvalía media para cada beneficiarios rondará 4,6 millones. El plazo de suscripción está previsto que concluya en septiembre.

Antes de su encuentro con los sindicatos, el flamante presidente de Telefónica se reunió con los responsables de las principales filiales del grupo en la comisión ejecutiva. Alierta, consejero de Telefónica desde 1997 y de Terra desde hace un año, conoce bien Telefónica.Por ello, la reunión no duró mucho. El ex presidente de Altadis fue presentado formalmente por su antecesor en el cargo a los miembros de la comisión y a continuación pasó revista a los temas pendientes. Según las citadas fuentes, Alierta transmitió la necesidad de devolver cuanto antes la normalidad a la empresa y de llevar a cabo una "transición ordenada y tranquila".

Además, se comprometió a cumplir los compromisos adquiridos por Villalonga, especialmente los referidos a la fusión de Terra con el portal de Internet estadounidense Lycos; el desarrollo de las alianzas con el grupo alemán Bertelsmann y el BBVA; la salida a Bolsa de la filial de móviles y la apuesta por la entrada en nuevos mercados de telefonía móvil de tercera generación (UMTS).

Conflicto en Media

Fuentes de la compañía aseguran que otra de las prioridades es reestablecer la paz en la filial de medios de comunicación. Su presidente, Manuel García-Durán, que no cuenta con el apoyo de los accionistas estables (BBVA y La Caixa) mantiene un duro enfrentamiento con su consejero delegado, Juan José Nieto, a quien algunos miembros del consejo han pedido que permanezca en la empresa hasta que se retorne a la tranquilidad. El origen del enfrentamiento está en los fichajes multimilllonarios de periodistas como Pepe Navarro y José María García que tenía apalabrados García-Durán.El nuevo presidente de Telefónica dividió su tiempo entre Telefónica y la tabaquera Altadis (antigua Tabacalera), donde se despidió de la cúpula y de los representantes sindicales. La compañía hispano-francesa celebrará un consejo extraordinario el próximo lunes para elegir como sustituto de Alierta en la presidencia a Pablo Isla, secretario general del Banco Popular.

Telefónica se revalorizó ayer un 0,88% en Bolsa en su primer día con nuevo presidente. Con un volumen de contratación de 135.500 millones, el 43% del mercado, la operadora llegó a ganar un 3,7%. Los recortes posteriores, que dejaron el valor en 23,95 euros (3.985 pesetas) coincidieron con el inicio de la contratación en EE UU, que abrió con pérdidas. El Nasdaq, que agrupa los valores tecnológicos, perdió un 3,13%.

La filial de Telefónica TPI-Páginas Amarilllas anunció un beneficio neto de 3.342 millones de pesetas en el primer semestre del año, lo que supone una caída del 43,6% respecto al mismo periodo del año anterior, y se dejó en Bolsa un 2,21%. La filial de Internet, Terra, sufrió una ligera caída del 0,91%