Air France y British Airways admiten la existencia de fallos en sus Concorde
Air France y British Airways admitieron ayer que han detectado microfisuras en las alas de sus aviones Concorde, pero aseguraron que no existe ningún riesgo para los pasajeros. El problema, detectado hace ya varios meses, afecta a los siete aparatos de la compañía aérea británica y a cuatro de los seis aviones supersónicos que componen la flota de la aerolínea francesa. Todos, menos uno, siguen en servicio. "Es un fenómeno conocido que afecta a muchos aviones, no sólo al Concorde", afirmó ayer un portavoz de Air France.British Airways fue la primera en reconocer problemas con sus Concorde -después de que la prensa británica publicara la información- para eliminar cualquier duda sobre la seguridad de sus aparatos. La aerolínea británica detectó fisuras en las alas de sus aviones hace "varios" meses. La empresa comunicó las anomalías a las autoridades de aviación civil, según un portavoz de la empresa, y obtuvieron permiso para que los aparatos supersónicos continuaran volando. Pero los técnicos de British Airways detectaron la semana pasada que las fisuras de uno de los aparatos habían crecido 16 milímetros. "Tan pronto como lo vimos, retiramos el avión del servicio", indicó el portavoz.
Algo similar sucedió en Air France, que ayer admitió fisuras en cuatro de sus seis Concorde, y también insistió en que no existen riesgos para la seguridad.
El Concorde, un proyecto anglofrancés que entró en servicio a mediados de los setenta, es el único avión supersónico de pasajeros del mundo. Sólo hay 13 en servicio: siete de British Airways y seis de Air France.
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