LA MUDANZA DEL EX CANCILLER
En compañía de su esposa, Sonja, y sus dos perros, Grolli y Kerry, el socialdemócrata Viktor Klima, ex jefe del Gobierno austriaco, prepara una gran mudanza bien lejos de su patria alpina, en manos ahora del Gobierno derechista-conservador liderado por Wolfgang Schüssel. Klima regresa a sus orígenes de ejecutivo de empresa y se marcha a dirigir la fábrica que la firma de automóviles Volkswagen tiene en Argentina, filial de la potente multinacional que encabeza desde 1993 un compatriota: Ferdinand Piëch, nieto del constructor de automóviles Ferdinand Porsche, también austriaco. La oferta que ha conseguido que el ex canciller abandone su querida Viena incluye un suculento contrato de unos 70 millones de pesetas anuales durante cinco ejercicios, además de una vivienda en Buenos Aires y otros gastos cubiertos, según los detalles revelados por el semanario Format. Viktor Klima se encuentra a los 53 años en plena metamorfosis: en menos de medio año ha dejado al mismo tiempo la política y el tabaco y ha perdido 20 kilos con una severa dieta que le sugirió su esposa, de 33 años. Ahora se atreve a afrontar como nuevo desafío el aprendizaje del español, idioma que su hijo Jan, casado con una española, domina casi a la perfección.-JULIETA RUDICH,
