Los críticos de Convergència, satisfechos por el giro moderado del discurso nacionalista del partido

El tono moderado del discurso que el presidente Jordi Pujol pronunció hace un par de semanas en la escuela de verano de Convergència Democràtica (CDC) ha caído como agua de mayo entre las filas del sector crítico del partido. Y ése fue uno de los elementos que se pusieron de relieve en la cena que el pasado martes organizó Catalanisme i Progrés, el sector moderado o crítico, según se mire, de CDC.Pujol se declaró -el 7 de julio, en Montbrió del Camp- partidario de explorar todas las posibilidades de acuerdo con el PP antes de abrir caminos con Esquerra Republicana. "Sabemos que es difícil mantener la relación actual con el Partido Popular, pero de momento es la única posibilidad que tenemos en esta situación de mayoría absoluta", aseguró uno de los asistentes a la cena de Catalanisme i Progrés, plataforma de la que forman parte la ex consejera Maria Eugènia Cuenca, el diputado Ignasi Guardans y el eurodiputado Carles Gasòliba. A la nueva orientación de Pujol se suman otros elementos que indican, a juicio de los críticos, que el partido va en la buena dirección.

En un comunicado hecho público ayer, Catalanisme i Progrés expresa su "gran satisfacción" al comprobar que últimamente "el discurso del partido en el seno del debate precongresual recoge gradualmente el espíritu del documento fundacional de esta corriente de opinión, un texto que supone un enfrentamiento con las tesis de nacionalismo identitario o esencialista que practica la cúpula de Convergència".

El comunicado también considera positivo "el proceso de cambio que se ha puesto en marcha en la secretaría general", que supondrá en la práctica el relevo de Pere Esteve por Artur Mas. Pero si los críticos están de acuerdo con el viraje capitaneado por Pujol, no les parece que el partido siga los mismos pasos en cuanto a capacidad de integración de su plataforma. "El partido de momento parece manejar las mismas listas de nombres para puestos claves", destacó un portavoz del grupo.

Una delegación de Catalanisme i Progrés se entrevistó hace unas semanas con el futuro secretario general, Artur Mas, quien no se comprometió a integrar las posiciones de la plataforma de opinión en la ponencia que él preside, la política. Esta ponencia, que inicialmente acentuaba el giro soberanista de la coalición, está tomando ahora nuevos derroteros, a juzgar por lo que ha avanzado el sector moderado del partido.