Putin defenderá ante el Parlamento una Rusia fuerte

Vladímir Putin pronunciará hoy ante los diputados y senadores su primer discurso sobre el estado de la nación, que tendrá sin duda como uno de sus principales ejes la defensa de un poder central fuerte. Mientras, la disputa parlamentaria por las leyes con las que el presidente ruso quiere recortar el poder de los líderes regionales entraba ayer en vías de arreglo al aceptar el Consejo de la Federación una comisión conciliadora con la Duma.La Cámara baja (que por primera vez en muchos años es mayoritariamente adicta al Kremlin) aprobó ayer, por 334 votos contra 27, la ley que completa el paquete presentado por Putin. Se trata de una especie de premio de consolación, pues los gobernadores podrán destituir a cargos de menor rango en sus feudos, con la excepción de algunas grandes ciudades.

Anteriormente, la Duma aprobó, siempre con mayoría superior a los dos tercios (necesaria para superar la oposición del Consejo de la Federación), la ley que excluye de la Cámara a los jefes de los poderes legislativo y ejecutivo de los 89 "sujetos" de la Federación Rusa y la que permite al presidente destituirles si violan las leyes federales. La primera fue rechazada por abrumadora mayoría en el Consejo, y cabe augurar el mismo destino para la segunda.

El choque frontal podría evitarse ahora si la comisión conciliadora logra un encuentro a medio camino que, además, debería contar con el visto bueno de Vladímir Putin, que ya ha dado a entender que no permitirá la desnaturalización de su proyecto.

Entre las soluciones que se manejan figura un "desalojo" progresivo del Senado por parte de los líderes regionales, a medida que vayan caducando sus actuales mandatos. En cualquier caso, el conflicto pondrá sordina a muchos de los aplausos que hoy reciba Vladímir Putin cuando explique su visión de Rusia y la receta para curar sus males.