Un experto dice que el mal uso del tiempo libre causa angustia y propone medidas educativas
Los jóvenes que no tienen televisión en su cuarto y que disponen de más de 50 libros en su casa tienen mayores posibilidades de acudir a la universidad. Este es uno de los datos que salieron ayer a relucir en la primera jornada del Congreso mundial de Ocio, que se abrió con la intervención del psicólogo estadounidense Mihaly Csiksentmihaly. El experto alertó sobre el mal uso del tiempo libre y destacó la angustia y la depresión que provoca el ocio en algunas personas. La relación entre creatividad y tiempo libre centró las ponencias de los expertos en el Palacio Euskalduna.
La influencia de la televisión
El ocio se asocia tradicionalmente a la idea de bienestar, pero no siempre es así. Según explicó el psicólogo y profesor de la Universidad de Claremont (EE UU), Mihaly Csiksentmihaly, el tiempo libre provoca angustia y depresión en muchas personas por el mal uso que se hace de él. La importancia del ocio en el desarrollo humano y la necesidad de plantearse retos durante el tiempo libre fueron algunas de las tesis que defendió Csiksentmihaly. El psicólogo norteamericano de origen húngaro aportó algunos datos que demuestran estas afirmaciones. Según un estudio realizado a jóvenes de su país, los adolescentes que no tienen televisión en su cuarto y que viven en una casa con más de 50 libros tienen más posibilidades de ir a una buena universidad, un hecho que se valora especialmente en el territorio estadounidense. Igualmente, y según esta encuesta, los jóvenes que se plantean retos en su tiempo libre presentan "una mejor trayectoria en la vida".
Csiksentmihaly reclamó a padres y profesores que enseñen a los niños a utilizar bien el tiempo. Y criticó el ejemplo que muchos jóvenes estadounidenses reciben de sus padres, "que malgastan su tiempo de ocio viendo la televisión, jugando a las cartas, bebiendo o simplemente, no haciendo nada". La influencia de la televisión y de las nuevas tecnologías fue uno de los temas centrales de las conferencias que se presentaron y cuyos efectos perniciosos, según Csiksentmihaly, no están suficientemente estudiados.
En este sentido, Enrique Nicanor, presidente de la Organización Mundial de Televisiones Input, criticó la baja calidad de los canales televisivos del sur de Europa, que, según destacó, viven "una crisis absoluta de creatividad". Nicanor lamentó la falta de diversidad en la oferta televisiva. "En todos los países europeos y, sobre todo, en España, sólo se ve un 30% de programas locales y el resto, son de Estados Unidos", destacó el presidente de Input.
Con Gretchen Amusen, directora de relaciones externas del Conservatorio de París, se cerraron las intervenciones sobre las relaciones entre ocio y creatividad, que centraron los debates de la mañana. Amusen defendió una mayor implicación entre intérpretes y público fomentando la explicación de las creaciones artísticas y aumentando las obras dedicadas a aficionados a la música y la danza y a la población de zonas deprimidas, entre otras iniciativas.
Hasta el viernes, cuando se clausurará el 6º Congreso Mundial de Ocio, se presentarán cerca de 400 ponencias científicas sobre el tiempo libre en todas sus vertientes en el Palacio Euskalduna y en la Universidad de Deusto, cuyo Instituto de Estudios de Ocio ha organizado este foro internacional.
Paralelamente al congreso, se celebra en la universidad bilbaína la feria del ocio, donde es posible participar en actividades deportivas y de riesgo, conocer las ofertas de agrupaciones y empresas o acudir como oyente al taller que organiza la Asociación española de pintores con el pie y la boca.
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