Se necesita una oposición

Soy una de los ocho millones de ciudadanos que votamos al PSOE en las pasadas elecciones, aunque, en mi caso, más por evitar una mayoría absoluta no deseada del Partido Popular que por premiar la gestión de la oposición en el periodo 1996-2000, que fue, digamos, insatisfactoria (y soy benévola).A pesar de la derrota de las generales confié en que al fin, en esta legislatura, el PSOE llevaría a cabo la labor que sus votantes le encomendábamos: ser la oposición que la izquierda merece, España necesita y los votantes esperamos como agua de mayo.

No estoy diciendo que no tengan el derecho legítimo a debatir sobre ideas y personas, sobre el pasado y el presente del partido. Faltaría más. Estoy rogando que, entre tanta portavocía y tanta rueda de prensa, haya alguna que se encargue de transmitirnos cómo van "nuestros asuntos", los que son de todos: cuál es la labor parlamentaria, cuáles son las propuestas sobre la sanidad pública, sobre la sangría de vidas en el Estrecho, sobre la nueva reforma laboral...; en fin, sobre todos esos problemas para los que seguro que el PSOE tiene una respuesta y un proyecto para el futuro.

No me parece tan insensato pedir que compaginen el trabajo para recomponer el partido con la tarea de hacer oposición. De una vez por todas. Sin excusas. A trabajar.- .