Los bomberos efectúan más de 150 salidas por las fuertes tormentas

Las fuertes tormentas que soportó ayer la región dieron bastante trabajo a los bomberos. Durante la jornada recibieron más de 150 avisos para achicar agua de garajes, apear ramas rotas y comprobar el estado de cornisas y fachadas. La mayor tromba cayó de tres a cinco de la tarde, según señaló un portavoz del Servicio de Urgencias y Rescate de la Comunidad de Madrid (Sercam).

La tormenta se desplazó a esas horas de oeste a este y afectó en especial a los municipios de Pozuelo de Alarcón, Parla, Arroyomolinos y Rivas-Vaciamadrid. En este último, los bomberos tuvieron que rescatar a los ocupantes de un autobús que quedó varado en una gran bolsa de agua en la avenida de Covibar.El teléfono de emergencias 112 recibió en esas dos horas más de 100 avisos de toda la región, de los que 27 correspondieron a Madrid capital. Entre las cinco y las seis de la tarde, sólo hubo cuatro llamadas de petición de auxilio. Los comunicantes solicitaban el desagüe de sótanos y garajes y la formación de balsas de agua en la vía pública. El portavoz del Sercam destacó como más importante la intervención efectuada en una vivienda de Camarma de Esteruelas, en cuyo interior el agua alcanzaba medio metro de altura. Los bomberos del Ayuntamiento de Madrid realizaron 70 salidas.

Las lluvias obligaron a suspender numerosos actos. En Leganés, se suspendió la 20ª edición de la carrera contra la droga, y en Getafe no se celebró el Día de la Bicicleta. La plataforma ecologista Jarama Vivo aplazó hasta septiembre la marcha para denunciar las agresiones que ha sufrido la cuenca del río.

La Dirección General de Protección Ciudadana avisó a las 13.00 a los municipios de la región de que había riesgo de precipitaciones de más de 30 litros por metro cuadrado en el intervalo de una hora. A los que no les importó el agua fue a los propios bomberos: más de 500 participaron en la primera carrera internacional para celebrar el centenario de su fundación en la capital.