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Giro de Italia

Garzelli sentencia el Giro

El 'delfín' de Pantani superó a Casagrande en la última cronoescalada de Sestrieres, que ganó el checo del Vitalicio, Hruska

Stefano Garzelli, del equipo de Marco Pantani, el Mercatone, continuó el protagonismo de su compañero en la jornada anterior y sentenció el Giro. Superó ampliamente en los 34 kilómetros de la cronoescalada de Sestrieres, la penúltima etapa, los 25 segundos que le distanciaban de la maglia rosa, Francesco Casagrande, y dejó al veterano corredor del Vini Caldirola sin el triunfo que ya acariciaba después de ser líder la mayor parte de la carrera. Sólo falta hoy la jornada intrascendente de Milán y todo está decidido.Ajeno a la pugna entre los primeros de la clasificación general, el checo Jan Hruska, del Vitalicio, se adjudicó su segunda victoria contrarreloj en el Giro (la primera en el prólogo de Roma) y confirmó la buena actuación de los equipos españoles, aunque no subirán al podio de la general. Entre Briançon y Sestrieres, Hruska fue el único que bajó de la hora, con 59.49 minutos y sacó una gran ventaja, 1.14 a Andrea Noe (Mapei) y 1.17 a Garzelli. Fue el cuarto triunfo del equipo de Javier Mínguez, que paradójicamente conocerá su futuro la próxima semana, en el Giro. El director vallisoletano ya se ha apresurado a decir que "se merecen un año más".

Casagrande, líder indiscutible desde la primera semana de carrera sucumbió ante sus carencias contra el reloj. El sacrificio de mejorar su rendimiento en las cumbres vino acompañado de la pérdida de peso y masa muscular que resultaron fatales para el jefe de filas del Vini Caldirola. Garzelli superó a Casagrande desde la rampa de salida. De todas formas, él mismo declaró al final que le sorprendió su buena actuación. En el primer punto de referencia, el puerto de Montgenevre, Stefano marcó 22.33 minutos, por 23.23 de Gilberto Simoni, el tercer aspirante al liderato, ó 24.18 de Casagrande. Sólo 10 kilómetros de cronoescalada ya habían lanzado al delfín de Marco Pantani hacia su triunfo más destacado.

Profesional desde 1997, natural de Besano, una pequeña localidad de 2.500 habitantes situada al norte de Varese, El Piratino, como ya se le apoda, apenas cuenta con el triunfo en la Vuelta a Suiza como hito más relevante de su palmarés. Este año prefirió preparar más el Giro que la temporada de clásicas, donde destacó desde sus comienzos (fue cuarto en la Milán-San Remo de 1999) en el Mercatone.

Casagrande perdió 1.52 minutos en la meta respecto a Garzelli y, con ese tiempo, el jersey de líder. Queda a 1.27, pero salvó por seis segundos la segunda plaza ante Simoni, quien se hizo acreedor en esta edición al premio a la combatividad. Rubiera, octavo en la general, será el mejor español, a más de ocho minutos.

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