_
_
_
_

El sustituto de Silvia distorsionará la casa, según el jefe de los psicólogos

Soledad Alcaide

De las 7.000 personas que se presentaron al casting de Gran Hermano fueron seleccionados 16 finalistas. Todos ellos recibieron un entrenamiento de 20 horas con psicólogos clínicos, y durante ese tiempo se les enfrentó a pruebas con situaciones que se podían dar durante el "confinamiento". De entre los seis que no resultaron elegidos para el grupo inicial, el equipo tiene que escoger estos días al que entrará la semana próxima en sustitución de Silvia. "Éste provocará una distorsión en la casa", señala el profesor Enrique García Huete, coordinador del equipo que realizó el casting por el que se seleccionó a los concursantes. "El grupo tendrá que aceptarle o rechazarle, pero la dinámica del concurso no va a cambiar, porque al final habrá un reequilibrio de los habitantes de la casa y luego se irán formando otra vez los subgrupos". Además, el sustituto aportará la novedad de lo que ocurre fuera. "Esto provocará cambios momentáneos de los de dentro, pero en dos o tres semanas todo será igual".

La única de las posibilidades que no preveía el formato de Gran Hermano era la de que los concursantes se negaran a eliminarse entre sí. Cuando esto sucedió en la primera semana, según cuenta el director general de Zeppelin, Secundino Velasco, el equipo llegó a pensar que los concursantes les habían saboteado el programa. Incluso se plantearon la posibilidad de retirarlos y traer a otros diez.

Pero fue el equipo de psicólogos adscrito al programa el que convenció a la productora de que era una situación normal. "Se convirtieron en un grupo de boy scouts", dice García Huete. "Un grupo de personas de sus características emocionales lo primero que hace es crear una fuerte cohesión de grupo. Al cabo de una o dos semanas empiezan a aparecer sus diferencias, motivadas por los roces de la convivencia. Y eso rompe los pactos", explica en clave profesional.

Según los psicólogos, el perfil seleccionado fue el de personas "altamente extrovertidas, estables emocionalmente, empáticas, de dureza emocional y con altas dosis de creatividad". "No era una cuestión de que divirtieran al público, sino de que ellos lo pasaran bien", asegura el psicólogo-jefe.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Soledad Alcaide
Defensora del Lector. Antes fue jefa de sección de Reportajes y Madrid (2021-2022), de Redes Sociales y Newsletters (2018-2021) y subdirectora de la Escuela de Periodismo UAM-EL PAÍS (2014-2018). Es licenciada en Derecho por la UAM y tiene un máster de Periodismo UAM-EL PAÍS y otro de Transformación Digital de ISDI Digital Talent. 

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_