El fraude del IVA en el sector de la chatarra se eleva a 45.000 millones
El fraude del IVA que cometieron algunas empresas del sector de la chatarra, por el que el juez imputó al ex alto cargo de Hacienda Miguel García Hoffman, asciende a 45.000 millones de pesetas. El Gremio de Recuperadores de Cataluña, la patronal del sector, facilitó ayer esta cifra y anunció que las irregularidades fiscales pueden ser todavía superiores en el conjunto de España. Las empresas que urdieron la trama no pertenencen a la patronal y habrían sido creadas para defraudar el IVA.
El gremio de chatarreros de Cataluña ha facilitado a la Agencia Tributaria diversos datos sobre el funcionamiento del sector y sobre la actividad presuntamente ilegal de decenas de sociedades "creadas específicamente para defraudar el IVA", según medios de la organización sectorial.El Juzgado de Instrucción de Barcelona número 16 ha abierto un sumario en el que se incluyen, además del citado exalto cargo de Hacienda, las empresas pertenecientes a la trama, que defraudó 2.500 millones de pesetas -la primera cifra facilitada por fuentes judiciales- a través de operaciones con facturas falsas del IVA.
La juez que investiga el caso dispone de grabaciones telefónicas que comprometen la labor de García Hoffman como asesor fiscal de una de las empresas implicadas. Se trata de Términus Metal, que se dedica a la venta de material de chatarra y cuyo administrador es Jaime Aguadé.
García Hoffman, que fue el delegado especial de Hacienda en Cataluña entre 1988 y 1995, fue detenido por la Guardia Civil durante unas horas el pasado martes 26 de abril, junto con otras 10 personas. Las empresas suministradores de facturas falsas son Cecomimetal, Ultrametálica y Miles Venus, según señalaron medios conocedores de la investigación. Los mismos medios sitúan en el centro de la trama a Eduardo Millán, que creó varias empresas.
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