El 'Nautilus' equivocado

Sabadell (Vallès Occidental) tiene una plaza dedicada al primer submarino atómico de la historia. La placa que preside la plaza lo expresa inequívocamente: Nautilus, el primer submarino atómico de los Estados Unidos (1954). El homenaje, sin embargo, es involuntario: lo que el equipo de gobierno municipal aprobó, en 1990, era dedicar una plaza al submarino ficticio inventado por Julio Verne. El consistorio ha aprobado recientemente enmendar el error. El Nautilus fue el orgullo de Estados Unidos durante la guerra fría. Botado por Harry Truman, logró batir todos los récords de velocidad y resistencia bajo el agua. Cuando el Nautilus consiguió cruzar el Polo Norte, su comandante, William R. Anderson , anunció la proeza como todo un hito histórico: "Para el mundo, para el país [Estados Unidos], para la Marina: el Polo Norte". El Nautilus fue, en definitiva, uno de los símbolos exhibidos por Estados Unidos para hacer frente al comunismo mundial.

La propuesta del equipo de gobierno de Sabadell, entonces integrado por Iniciativa per Catalunya-Verds (IC-V) -precisamente la formación sucesora del comunista PSUC-, no era rendir tributo a la poderosa maquinaria militar de Estados Unidos. Cuando el pleno del Ayuntamiento de Sabadell aprobó el nombre de la plaza, en noviembre de 1990, pensaban en otro Nautilus, el ficticio. Pero Julio Verne y las aventuras del capitán Nemo en sus 20.000 leguas de viaje submarino se vieron desplazados por algo muy real: el USS Nautilus. Los que se encargaron de realizar la placa y escribir la explicación del nombre, el Departamento de Normalización Lingüística, se confundieron de Nautilus.

Diez años después, el Ayuntamiento va a enmendar su error. En el último pleno, el grupo de la oposición, la Entesa per Sabadell, propuso cambiar la explicación del nombre. El equipo de gobierno, formado por el PSC, IC-V, ERC y CiU, reaccionó rápidamente afirmando, entre risas, que éste no era un error suyo sino del anterior gobierno, pero aceptó cambiar la placa. El próximo Nautilus será algo menos bélico y más romántico.